jueves, octubre 30, 2008

Paris

Colegas,

Pues nada, que aqui me reporto a este buroblog desde la fria y lluviosa capital francesa, lugar desde donde escribo estas lineas viendo a los parisinos caminar y entrar a los bares y restaurantes cercanos al Blvd. Montparnasse.

Prometo realizar una cronica decente pronto porque, por el momento, tengo bastantes problemas tratando de adaptarme a este teclado con letras cambiadas de lugar. Tambien el factor Euro cuenta para ser breves...

Un saludo desde aca y... bon jouuuur.

miércoles, octubre 29, 2008

Nunca falla

Y efectivamente, apenas el Maese Manolo deja el changarro y les da por suceder cosas extrañas.

Lo primero, espero que no haya optado por viajar por la línea aérea AVOLAR porque a los que mandaron a volar fueron a sus usuarios, también espero que no utilice Aviacsa, porque ya anda en riesgo de andar por las mismas, aunque de momento se ha salvado.

Aunque contamos con información privilegiada de que el Maestro sólo viaja por aerolíneas de cinco estrellas y puros vuelos internacionales.

También les dio por aprobar la tan llevada reforma energética, que no es sino una serie de adecuaciones al régimen de Pemex, sin que se llegue a lo extraordinario.

Yo no sé porqué causan tanta alharaca el hecho de que el Congreso aprobara la mencionada reforma, que para variar quedó como Frankenstein.

Lo verdaderamente sorprendente es que nuestros legisladores se hayan puesto de acuerdo en algo; pero si pudiéramos calificar en una escala del uno al diez el resultado, yo le daría un seis.

Es cierto, el logro político fue mayor y el primer gobierno panista dio un buen golpe al Peje y a Fox, que al parecer se están convirtiendo en leyendas urbanas. Tal vez tenga algo de razón el Peje en propugnar otros aspectos en la reforma, pero la forma en que lo sostiene lo descalifica argumentativa mente, ya nadie quiere saber de pleitos y como andan las cosas en el país no se ve nada bien algo que parezca violento.

Por otra parte, aunque he de decir que Calderón no me simpatiza, es de reconocerse que por lo menos sabe hacer labor política, algo que en el sexenio foxista era impensable y daba la impresión de no contar con operadores, da un vuelco y ahora vemos que los panistas si pueden hacer labor de convencimiento, aunque insisto que fue a un alto costo; por ejemplo, quedo muy mal la Secretaria de Energía, hace unos meses decía que no se podía construir una refinería y daba sus razones técnicas para sostener su tesis de que ni en cien años podría hacerse; al cabo de unos meses el mismo presidente dice que sí se va a construir una refinería en el país, entonces o suponen que todos sufrimos de Alzhaimer o lo padecen.

Otro aspecto que provocó esta situación, fue la participación social (mal interpretada) ahora todos nos creemos expertos petroleros y opinamos sobre el tema desde el abogado hasta el taxista, pasando por el ama de casa, el estudiante, el albañil, secretarios de estado, los diputados y senadores.

Si todos somos egresados del Instituto del Petróleo, entonces no entiendo como hasta ahora nos ponemos a decir que tal o cual cosa se debe hacer.

Creo que necesitamos más de estos debates, porpongo que ahora se ponga en la agenda pública temas como la seguridad, el desempleo y el propio tema financiero, a ver si nos ponemos de acuerdo y por lo menos hacemos algo al respecto.

martes, octubre 28, 2008

Transiciones

Pues no nos queda más que desearle buen viaje al Maese Manolo y esperar que en su ausencia no suceda algún terremoto o que no renuncie el Rector y que sigan perdiendo las gallinas; de los pumas no quiero ni hablar.

No se si sea este año pero como que todos estamos montados en un gran viaje. Desde que estoy por tierras sureñas me siento con la añoranza de regresar al terruño natal, pero también aliviado de estar por estos rumbos. En esa ambivalencia que ataca a todo migrante y ese sentimiento de no sentirse ni de aquí ni de allá, somos víctimas de andar recorriendo medio país por lo menos cada dos meses.

Por otro lado se encuentran los compromisos laborales y familiares y el lógico deseo del merecido descanso que irónicamente implica el enfrentarse en ocasiones a largos y tediosos viajes para alcanzar el paraíso perdido y perseguido.

Esperemos que durante la ausencia del Maese todo se mantenga en su lugar y que a su regreso le podamos dar parte sin novedad.

Desafiando...

Desafiando a la crisis financiera mundial, a la crisis alimentaria, a la crisis humana y de valores (según los vibrosos), a la negativa para aprobar la reforma energética ("pírrica y pequeña", según el ex presidente Fox), a las señales del Apocalipsis Ahora, a la premonición maya de que el planeta termina su existencia dentro de cuatro años, a la mala racha de Pumas en el campeonato local, en fin, a grandes y variados obstáculos, yo, desde esta trinchera burocrática, anuncio mi cuarta salida del país.

En efecto, en unas horas estaré tomando un vuelo que me llevará lejos, lejos.

Espero reportar puntualmente de mi llegada en cuanto me sea posible.

Por lo pronto, encarecidamente les encargo el país y la Universidad (ha sucedido que cuando me voy suelen pasar cosas extrañas).

Adelante.

viernes, octubre 24, 2008

Mañanas

No me había dado cuenta de lo bella que es Ciudad Universitaria por las mañanas. Ese paisaje de prados, edificios, estudiantes (pocos) y bruma en el sur de la Ciudad de México me conmueve y me exalta el Orgullo Azul y Oro.

En general, siempre he sabido que me gustan las mañanas. Un colega de esta oficina me dijo un día que tengo costumbres de abuelito. En efecto, los ancianos suelen levantarse muy temprano para aprovechar esas primeras horas del día. Yo no hago eso, claro, pero cuando por alguna razón estoy en pie por ahí de las siete u ocho de la mañana y veo la vida pasar en esos instantes, me siento contento. Como hoy.

Sin embargo, sí tengo otros hábitos de adulto mayor, por ejemplo, comprar el diario, tomar café con leche en el cual mojo el pan dulce que me desayuno, sentarme en un parque a mirar a las palomas comer el pan que la gente les tira... (guiño a Calamaro). En fin.

Todo este asunto es porque me gustan las mañanas como hoy: con cielo azul, con frío y sin gente.

¿Qué más se puede pedir para arrancar un viernes?



jueves, octubre 23, 2008

Día del Médico

Bueno, y en otros temas más terrenales, acabo de escuchar en la radio que los muchachos del escritorio ponen puntualmente todas las mañanas que hoy, 23 de octubre del Año del Señor 2008, se conmemora el Día del Médico. Por lo tanto, desde este buroblog que es analgésico y antitranspirante al mismo tiempo les enviamos nuestros parabienes a esta especie de la humanidad.

Y, para no variar, yo mismo he celebrado este acontecimiento desde el día de ayer con una visita a mi médico de cabecera. En efecto, mi descuido y mi relajamiento de la disciplina nutricional me han ocasionado un desperfecto --al parecer-- vinculado con el ácido úrico. Por lo tanto, he tenido que realizar una visita a los dominios de los galenos para diagnosticar el mal que aqueja a una de mis articulaciones.

Aaah. Los médicos..., esa extraña variante de los oficios que deben lidiar con los problemas de salud de la gente. Los mismos que deben mostrarse ecuánimes ante el sufrimiento, el dolor y la incertidumbre. Los mismos cuyo objeto de estudio y de trabajo es la vida y la muerte de las personas (nada más y nada menos).

Mi primer contacto con ellos fue desde pequeño, pero no porque fuese un chico enfermizo (de hecho, siempre fui bastante sano... hasta como los 27 años). Y digo que fue en mi infancia porque fue en esa etapa cuando veía a mis padres recurrir constantemente a ellos. Ahí pude tener mi primer experiencia respecto a sus personalidades: algunos son bastante humanitarios y sabios, pero otros pueden ser la verdadera encarnación de lo que en mexicano se conoce como hijos de la chingada.

Ahora mis vínculos se han convertido en algo más certero y confuso al mismo tiempo. Es decir, no confío en los médicos en general. Confío en los que me atienden, en mi médico de cabecera y en mi gastroenterólogo. Nada más. Si asisto con cualquier otro lo primero que me viene a la mente es preguntarme si tiene las capacidades, las destrezas y, sobre todo, la experiencia suficiente para dar un buen diagnóstico. Lo anterior creo que tiene mucho que ver con lo que me sucedió en abril-mayo de 2007, El Año Cabrón, donde por una mala medicación en el ISSSTE me pusieron fuera de combate debido a una hepatitis reactiva no especificada.

Sin embargo, reconozco el valor y la importancia de este gremio. Sin los médicos muchos no estaríamos aquí. Así de simple. Pienso en todas esas personas a las que han salvado en el último momento. Pienso en los comentarios que hacía el Dr. Cuanalo sobre sus intervenciones en la Sierra con gente de escasos recursos y enfermedades perfectamente controlables en sociedades más o menos modernas. Pienso en las series de televisión que tratan sobre hospitales generales, médicos, enfermeras y casos rarísimos de infecciones y tal.

Por lo tanto, gracias sinceras a todos los médicos que sienten vocación y responsabilidad por su profesión. En contraste, a todos los charlatanes y engreídos que pululan por el planeta usurpando el buen nombre de esta especie, en especial en las instituciones de salud públicas, mi total desprecio.

Afortunadamente, estos últimos son los menos...




La voz del pueblo

Quisiera ver la cara de esos intelectuales que fueron a hacer el caldo gordo a Andrés Manuel López Obrador. Los mismos que, después de sesudas reflexiones y detallados análisis, dieron su aval a los dictámenes de la reforma energética discutidos en el Senado, los cuales, por cierto, también obtuvieron el visto bueno de los legisladores miembros del PRD y del FAP.

Quisiera ver sus rostros ahora que el señor ha decidido, previa consulta al "pueblo", que siempre no, que no está a favor de esta propuesta de reforma, a pesar de que en un primer momento había afirmado que se habían eliminado los visos de privatización y entreguismo de la misma.

Esos mismos intelectuales, tan sabios y tan reconocidos, tan comprometidos y tan inquietos, con toda su sapiencia y sus antecedentes de oráculos económicos, políticos y sociales, desplazados por una reducida cantidad de "pueblo" a la hora de tomar las verdaderas decisiones. De nada ha servido su opinión respecto a la conveniencia de apoyar los dictámenes elaborados en la Cámara Alta. Tampoco que aparecieran dando la cara a nombre de las izquierdas (como lo hizo el economista Rolando Cordera). No. Al final del día todo se resolvió mediante un ejercicio supuestamente democrático de pedirle la opinión al "pueblo" en la plaza pública (el Hemiciclo a Juárez de La Alameda), ese ente etéreo y confuso, pero que nunca se equivoca, para decidir si se iniciaban las acciones de "resistencia civil pacífica".

Perdón, pero no puedo evitarlo: ¡JA!

Señores intelectuales, mejor regresen a donde deben estar: en las aulas, en la academia, en la enseñanza de las nuevas generaciones. Ahí se necesita su labor, no tratando de agradar a un mini-príncipe susurrándole al oído cosas que luego no tomará en cuenta.

Mejor eduquen a ese ente que, al parecer, es el único al que toma en cuenta Pejehová: El Pueblo.

martes, octubre 21, 2008

Martes rubí

Leo que el técnico mexicano Javier Aguirre está a punto de irse del banquillo del Atlético de Madrid. No será la primera vez que está en una posición riesgosa, pero presiento que ahora sí se hará efectiva. A mí también me han sorprendido las derrotas consecutivas --y dolorosas-- contra el FC Barcelona y contra el Real Madrid CF. Imagino cómo deben estar las autoridades de su actual club, tan engreídas y tan jodonas como suelen ser.

La verdad, creo que lo mejor para Aguirre es dejar ya al Atlético. Ha sido un desgaste bárbaro y, bueno, al final del día los ha puesto donde le dijeron: en Liga de Campeones y con amplias posibilidades de escalar en la tabla general de la Liga casera. Pero de ahí a tener que estar lidiando con Cerezo, con jugadores como Simao y con la propia hinchada brava capitalina, creo que ya ha sido suficiente.

No faltarán nuevas oportunidades para Aguirre. Quizás hasta un día vuelva al Manzanares y, con su nuevo cuadro, derrote a los rojiblancos que, por cierto, cuando estuvieron en México hace unos meses, no mostraron más que lo que pudo haber dado el Xoloscuinqles (o como se escriba) de Tijuana o los Petroleros de Salamanca.

Tal cual.

También he leído que un cantante mexicano llamado Enrique Guzmán ha mostrado su preocupación porque la opinión pública puede vincular a uno de sus hijos con el narcotráfico. La razón: el jovenzuelo estaba en la fiesta que se montaron estos tipos en una verdadera mansión allá por el Desierto de los Leones y hasta donde llegaron las fuerzas federales a aprehenderlos.

La verdad, comparto su histeria. ¿Quién impedirá que la malpensada opinión pública, siempre ávida de chismes y de ver en un charco de sangre a los personajes que al mismo tiempo ama y odia, señale al vástago de él y de Silvia Pinal en esa actividad sólo porque, oh coincidencia, estaba en la misma pachanga que los colombianos?

Desde aquí pido una disculpa a nombre de todos los mexicanos que osen al menos dudar de la honorabilidad del chico.

Reuniones

Hoy me encontraba en una reunión en un salón al que tenía acceso a internet, entre a este buroblog y casi enseguida entre a uno de los enlaces, leí entonces un artículo de Letras Libres y pasé al blog de Sheridan, cuya última publicación se refería al reciente premio Nobel de literatura 2008.

El artículo era bastante filoso, la única referencia que tenía del tal Le Clezio era la referencia que se dio en el noticiero nocturno y la nota de la agencia oficial, en resumen eran referencias a que el premiado había vivido en México y escrito sobre su estancia en este país, que Octavio Paz le había dicho que era "nobelizable", que tenía una casa en las cercanías de Morelia y que actualmente vivía en Nuevo México.

Este artículo de Sheridan, que por lo que veo también llamó la atención de mi colega Manolo, es la segunda y más sustancial noticia que tengo del escritor y con dos muestras de su lírica me bastan para coincidir con el crítico. La verdad nunca he confiado en los premios y menos en los de literatura y de la Paz que año con año otorgan en Estocolmo. Me imagino que son los más subjetivos, en las otras categorías casi no hay controversia, ya sea por ignorancia o porque realmente siempre parecen respaldar un trabajo arduo de investigación en cada una de las disciplinas.

Ha habido muchos desaciertos en el caso de la categoría literaria, las críticas van desde que se otorga por un complejo de culpa, pago de facturas o intereses para impulsar alguna carrera.

Pero por los ejemplos que vemos, creo que este es uno de los fiascos mayores, nunca me ha gustado leer autores premiados, en ocasiones coincido que un autor leído resulta premiado, pero eso es distinto. En este caso me da flojera hasta buscar alguno de sus títulos, iré a alguna biblioteca para constatar que tan mala fue la designación de este año.

lunes, octubre 20, 2008

JMG Le Clézio

Guillermo Sheridan ha escrito algo sobre el flamante Premio Nobel de Literatura que vale la pena compartir.

Adelante.


Nobelito
Guillermo Sheridan

¿El Nobel a JMG Le Clézio? Bueno... las güeritas Kate Leslie y Harriet Winslow tienen un nuevo amiguito, gracias a una academia bobalicona, tan ufana de su buena conciencia y tan decidida a no leer demasiado (si de novelistas franceses se trataba... ¿habrán oído hablar siquiera de Michel Tournier?).

Me parece bien, sobre la emoción que embarga a los nacionalistas colgados de Extranjía, el comentario sobre Le Clézio de Christopher Domínguez en su columna del suplemento del Reforma este domingo. Luego de leer La conquista divina de Michoacán y El sueño mexicano, concluye que “la lectura de este par de libros le dará al curioso, sea mexicano o extranjero, una impresión más bien pobre del talento ensayístico del nuevo Nobel y quizá no le deje mucho entusiasmo por su veta de pensador”. El sueño mexicano le parece “un verdadero libro de aficionado o de diletante”, “más una monografía universitaria que un ensayo literario”, cuando mucho recomendable como una “buena introducción al México antiguo y a sus mitos” para un “turista ilustrado en su primer viaje a México”. Si bien considera que su prólogo a El libro del Chilam Balam de Chumayel es mejor, en tanto expresión del interés de Le Clézio por el “encuentro de literatura y mito”, concluye que “como intérprete de los mitos mesoamericanos y de su sobrevivencia entre los indios contemporáneos... es poca cosa Le Clézio.”

En cambio, me parece que como intérprete de los mitos mexicanos modernos su labor es bastante más apreciable. Asómese el lector osado al elocuente resumen que aporta en Diego et Frida (Stock, 1993), un vademecum del sentimentalismo y un refrito de los lugares comunes más bobos y predecibles sobre México, su revolución, su arte y su cultura, encarnados en los protagonistas arquetípicos. El mito reforzado parte de la consabida premisa de que el pintor y la pintora se hallaban “encendidos por la fe revolucionaria por la glorificación del pasado amerindio de México”, y que por ello


dedicaron toda su vida a buscar el ideal del mundo amerindio. Fue ese ideal el que les dio su fe revolucionaria y el que hizo brillar, en medio de un país devastado por la guerra civil, el relámpago único del pasado como una luz que atrae las miradas de la América entera y simboliza la promesa de una nueva grandeza. (p. 20)

Ese ideal, desde luego, no está muy perfilado: para eso es ideal (aunque parece estar entre los muslitos de la diosa Tlazolteotl que, según M. Le Clézio, en cualquier momento, agarra y revive y lo da a luz). Sí, misma, gastada, europeizante resurrección de los ídolos aztecas que en Tablada era autoparodia y en Lawrence fantasía ideológica...

Frente a las potencias amerindias, el resto es horrible: el porfiriato es apenas escenario de algunos micos vergonzosos que imitan a “occidente” mientras desprecian a las culturas indígenas; su gusto es un “pompierismo a la vez siniestro y ridículo”; los escritores huyen a Europa buscando “el aire de la libertad”; la revolución de Madero es una ola que “nace del abuso de los conquistadores y su violación de conciencia indígena”; Villa y Zapata, “violentos, incultos, intransigentes, son los verdaderos símbolos del pueblo mexicano”; la ciudad de México es “sinónimo de un faro para los pueblos oprimidos de América” mientras que su cultura “reinventa los valores mexicanos, el arte y el pensamiento de las civilizaciones prehispánicas” y, desde luego,


En la historia de México, Diego y Frida continúan brillando como brasas vivas, y sus rojos fulgores son las joyas puras de los niños pobres...

Y así sucesivamente.

No, nunca se han interpretado mejor los mitos mexicanos modernos. ¿Para qué buscar la verdad si los mitos son tan hospitalarios? Gracias a Le Clézio y a su clientela de turistas de los próximos meses (incluyendo los locales), esos mitos adquirirán una nueva, rejuvenecida, estólida solidez...

Volver

Es gracioso regresar al pueblo poblano: uno nunca sabe qué es lo que puede suceder.

Este fin de semana fui expresamente a realizar un trámite en una Notaría, pero resulta que no se pudo porque no tenían electricidad. El asunto es que un día antes unos avezados se habían robado el cable. Bueno.

El clima frío y lluvioso me recordó en dónde me encontraba parado a cada momento. También la comida típica, de la cual puedo decir con cierta pena que me atasqué. En fin. Colesterol malo al alza.

En la noche un café en un lugar que también funciona como centro de espectáculos (o algo así). Saludé a una coleguita, luego a otros dos y luego a otros dos. ¿De dónde han salido? De mis relaciones pasadas. Creo que a las amistades les sienta bien ese lapso que transcurre entre el último y el más reciente encuentro. Es ahí donde se exaltan las virtudes de las personas y se extrañan las aportaciones de cada uno. En fin.

Luego, de regreso por la carretera, más lluvia y más frío, como diciendo aquí te espero cuando vuelvas: el sempiterno e inamovible clima de ese lugar en el que crecí.

Francisco J. Rubia, neurofisiólogo

"El cerebro masculino analiza, el femenino empatiza".

VÍCTOR-M. AMELA

Tengo 70 años. Nací en Málaga, vivo en Madrid. Soy catedrático emérito de Neurofisiología, director de la unidad de Cartografía Cerebral de la Universidad Complutense. Estoy casado y tengo dos hijos y un nieto. La política me asquea. La espiritualidad es una función neuronal.

¿Mi cerebro es macho o hembra?

Siendo usted un feto de seis semanas, guiado por el cromosoma Y, su organismo comenzó a formar testículos...

Aquí siguen.

... que liberaron testosterona en su torrente sanguíneo, que llegó a su cerebro... convirtiéndolo en un cerebro masculino.

¿En qué difieren un cerebro masculino y un cerebro femenino?

En el hipocampo: ciertos núcleos intersticiales y otras estructuras son mayores en hombres que en mujeres.

¿El sexo está en el cerebro?

Al final, todo está en el cerebro. A más testosterona en la sangre fetal, mayor desarrollo del hemisferio derecho.

¿El cerebro masculino es de derechas?

El cerebro femenino es hemisféricamente más equilibrado.

¿Qué funciones rige el hemisferio izquierdo?

Capacidad para acopiar vocabulario, habilidades comunicativas y sociabilidad: en esto el cerebro femenino es mejor.

¿Y el derecho?

Las habilidades visuoespaciales o geométricas. Por eso el cerebro masculino es mejor para orientarse en el espacio.

¿Existen más diferencias?

Sí, en las fibras que unen ambos hemisferios, llamadas cuerpo calloso: ¡hay muchas más en el cerebro femenino en las áreas que rigen la emoción y la afectividad!

Estas diferencias cerebrales ¿es lo que nos hace distintos a hombres y mujeres?

Pesan mucho. Somos combinación inextricable de factores genético-hormonales y factores medioambientales. Pero, simplificando, tenemos de partida distintas aptitudes.

Hágame la lista de lo mío.

El hombre puntúa más alto en capacidad visuoespacial, en memorización y detección de formas, en geometría, en el aprendizaje de laberintos, en la lectura de mapas, en apuntar y seguir objetos, en lanzamiento de objetos a una diana, en conocimientos geográficos, en agresividad - dato: el 90% de los condenados por delitos violentos son hombres-, en composición musical, en ajedrez, en resolución de problemas matemáticos…

Y la mujer puntúa más alto en...

En fluidez verbal, en tareas motoras finas, en la localización de objetos entre una serie de ellos, en cálculo, en sensibilidad, en la percepción de niveles bajos de estimulación de gusto, olfato, audición y tacto, en reconocimiento de caras familiares, en la expresión facial o en el tono de voz… Y, sobre todo, en el discernimiento de emociones ajenas, es decir, en su capacidad de empatizar.

Resúmame todas estas diferencias.

El cerebro femenino es mejor para empatizar con otros. El cerebro masculino, para analizar, explorar y sistematizar.

¿Qué sentido evolutivo tiene esto?

La colega Doreen Kimura sostiene que se debe a millares de años de división del trabajo: el hombre cazaba y defendía al grupo - conviene silencio, orientación, puntería, fuerza y agresividad-, y la mujer recogía alimentos cerca del hogar, preparaba comida y vestidos y cuidaba de los pequeños (conviene tener detectados todos los objetos del grupo, saber dónde está cada cosa, reconocer rápidamente a sus bebés y vigilar su localización, saber qué les sucede a sus congéneres de alrededor...).

¿Y todo esto modeló cerebros?

La evolución natural fue seleccionando las aptitudes cerebrales más propicias.

Alguien con un cerebro megafemenino ¿resultaría ser megaempático?

Sí, lo que exacerbado derivaría en un síndrome de Williams: niños muy parlanchines y muy susceptibles a las caras de los demás. Y alguien con un cerebro extremadamente masculino sería autista: incapaz de empatizar. El autismo afecta diez veces más a chicos que a chicas.

Quizá todos tengamos un cerebro bisexual, en diverso gradiente.

En homosexuales se han detectado estructuras cerebrales a medio camino entre las heterosexuales masculinas y femeninas. Y el núcleo supraquiasmático es mayor en hombres homosexuales que en hombres heterosexuales. Pero faltan estudios de mujeres homosexuales, faltan muchos estudios y estadísticas, siendo tanta la maraña de factores genéticos, hormonales, ambientales... Y más ahora, que hemos superado a la naturaleza, manipulando hormonas y genes…

En el mundo animal, ¿cómo les va?

Ahí sucede de todo. Un besugo puede cambiar de sexo varias veces durante su vida. Las babosas montan orgías en que cada una es a la vez macho y hembra...

Mira qué bien.

También hay especies en que la hembra devora al macho tras la cópula.

Eso ya no es tan divertido…

Lo cierto es que los humanos nacemos con predisposiciones innatas, algunas más masculinas y otras más femeninas. No hay tabula rasa.A una niña la dejaron jugar sólo con un camión de bomberos y acabó acunándolo... O sea, que no somos tan libres como creemos, lo que tampoco es tan grave.

Dadas esas diferencias, ¿convendría educar por separado a niños y niñas?

Convendría plantearse cómo optimizar el desarrollo de las aptitudes de que nos ha dotado nuestro cerebro sexual, y cómo reforzar las demás aptitudes.


Ajedrez

Rubia ha investigado durante más de cuarenta años la fisiología del sistema nervioso y es un profundo conocedor de los últimos hallazgos de las entretelas del cerebro humano, vertidos amenamente en obras como El cerebro nos engaña,La percepción divina o El sexo del cerebro.Aprovecho que habla en CosmoCaixa para preguntarle: sostengo que hay tantos sexos como individuos, pero la ciencia clasifica y dice que hay cerebros femeninos y cerebros masculinos, a causa de la selección natural adaptativa de genes y hormonas al entorno. Pero Rubia se despide así: "El cerebro masculino acopia más habilidades para el juego del ajedrez..., pero mi hija me ha ganado siempre que hemos jugado".

domingo, octubre 19, 2008

Hace un tiempo todo el mundo hablaba con temor y estupefacción de tragedias bíblicas que amenazaban al planeta como el cambio climático, la crisis alimentaria y la cepa H5N5 causante de la gripe aviar.

Hoy nadie las recuerda.

¿Será que ha pasado el peligro que representaban, o bien, que la crisis económica que campea con la gallardía de uno de los Cuatro Jinetes del Apocalipsis Ahora es, en verdad, terrorífica?

viernes, octubre 17, 2008

Sex en el Sex D' Bur ®

Bueno, navegando aquí por la terracería de la información mexica y sus diarios en línea, me he encontrado con esta lista de cuestiones curiositas sobre el sexo y la ciudad...

Veamos (sirven como para comentar cuando se forman esos silencios incómodos en las reuniones).


Las 21 verdades más increíbles sobre el sexo
El Universal


Datos interesantes sobre el sexo que usted nunca imaginó que fueran verdad.

El Gráfico recopiló algunos datos interesantes sobre el sexo que usted nunca imaginó que fueran verdad:

1. De acuerdo con el Instituto Kinsey, la erección de pene más larga de la que se tenga registro midió 39 centímetros. La más corta, en cambio, fue registrada en tan solo 4.5 centímetros.

2. La fantasía sexual más común es el sexo oral.

3. Un 8 por ciento de las personas practica regularmente el sexo anal.

4. Un 60% de los hombres y 54% de las mujeres han tenido sexo ocasional de sólo una noche.

5. Las mujeres compran 4 de cada 10 condones vendidos.

6. En 1609, un doctor llamado Wecker encontró un cadáver con dos penes. Desde entonces, se han documentado 80 casos similares.

7. Los hombres dicen que el promedio de una erección mide 25 centímetros. Las mujeres afirman que es 10 centímetros.

8. Un orgasmo femenino es un poderoso analgésico debido a la liberación de endorfinas, por lo que los dolores de cabeza son un mal pretexto para no tener sexo.

9. 56% de los hombres han tenido sexo en el trabajo.

10. Entre el pueblo Mangaiano de Polinesia, las parejas de 18 años tienen relaciones sexuales en promedio tres veces por la noche, todas las noches, hasta que cumplen 30 años, cuando su promedio cae a sólo 14 veces por semana.

11. Una de cada tres personas ha tenido una aventura extramarital.

12. Un 62 % de las personas piensa que no hay nada malo con las relaciones extramaritales.

13. La velocidad máxima a la que viajan las sensaciones eróticas a través de la piel hacia el cerebro es de 230 kilómetros por hora.

14. Una pareja lunamielera demandó a la cadena hotelera Holliday Inn por 10 mil dólares, acusándola de haber causado traumas sexuales en su vida debido a que un empleado entró a su habitación sin avisar durante su noche de bodas.

15. Al menos 500 personas mueren en Estados Unidos de asfixia al intentar de reducir el flujo de oxígeno al cerebro para inducir un orgasmo más poderoso.

16. El Rey Eduardo VII de Inglaterra, que era extraordinariamente alto, mandó construir una tabla para poder tener relaciones sexuales cómodamente.

17. Un 29 por ciento de las mujeres llega virgen al matrimonio.

18. El promedio de las relaciones sexuales dura 39 minutos.

19. Un 58% de las personas acostumbra decir groserías durante el sexo.

20- El 22 % de las personas ha rentado una película pornográfica al menos una vez.

21. Con la frecuencia promedio de relaciones sexuales, a un mexicano le tomaría cuatro años para probar cada una de las 529 posiciones descritas en el Kama Sutra.



jueves, octubre 16, 2008

Onanismos mentales

Leo en el diario de hoy sobre un caso --de los muchísimos que deben existir-- de adeudos asfixiantes con las tarjetas de crédito. Se trata de un señor, digamos, equis, que tiene alrededor de 10 plásticos diferentes con bancos y tiendas departamentales. Con ellas, dice la nota, pagó desde análisis clínicos de emergencia hasta los clásicos lujos que se pueden dar los que asisten a las ventas nocturas que montan los almacenes. El resultado: hoy debe cualquier cantidad de dinero y, por lo tanto, vive angustiado.

Su teléfono suena hasta los fines de semana con la engorrosa y fastidiosa voz de los emisarios bancarios exigiendo su pago. Ha tenido que deshacerse del coche, pero lo que obtuvo fue absorbido de manera inmediata por sus adeudos. En fin. Una especie de tragedia no bíblica, pero sí hiper puntual y puntillosa (de la categoría cuchillito de palo, en los términos de las abuelitas).

Y esto me ha recordado algo: que yo detesto las tarjetas de crédito. De hecho, siempre he visto con cierto estupor las deudas, en cualquier formato que se tengan. Es decir, aquellas cosas que se pagan con dinero que, al final del día, no es tuyo, y que luego habrá que pagar a un precio mucho mayor del que representaba la operación inicial.

Encontrarse con algún deudor de tarjetas de crédito no es nada complicado. Recuerdo a la esposa de un colega del pueblo que ahora vive en Puebla que siempre se quejaba por lo excesivo de sus adeudos. Hombre, pues que deje de comprar con la tal tarjeta, ¿no? Otro colega también dice que tiene un saldo negativo de alrededor de 40 mil pesos, ¿qué tal? Un tipo de esta nueva oficina se levanta el cuello y afirma con voz peligrosamente arrogante que él no le pagó nada de lo que le debía al banco. Un caso más de esa cultura política tan mexicana del agandalle al otro.

Pero, ante esto, mi pregunta es, ¿y para qué se meten en esos problemas solitos? Hay que estar mal de la cabeza para hacerlo. Al menos eso creo yo.

En mi cartera sólo hay una tarjeta de crédito. Una. Que evito tocar en lo posible. La adquirí hace como tres años cuando tuve que comprar un libro por internet para mi tesis de maestría. Nada más. Luego me ha servido para pagar algunas cosas (por ejemplo, entradas para conciertos o partidos de fútbol) o para realizar reservaciones en las que sólo aceptan este tipo de medio de pago. Pero nada más. Y menos cuando una vez me percaté de la voracidad de estos tipos (BBVA) al haberme retrasado unos días en el pago (nunca recibí el estado de cuenta en mi domicilio), y luego ya me estaban comenzando a aparecer saldos, comisiones y demás cosas de la nada.

Siempre pago todo el saldo, nunca sólo el mínimo. Por eso creo que mi crédito se ha mantenido discretísimo, es decir no me lo han ensanchado a esos niveles que algunos presumen como muestra de su estatus social o de su poder económico. Pobres ingenuos. Cuando leo casos como el que he relatado líneas arriba me río de ellos: ¿de qué les sirve tener una, dos, tres, 40 tarjetas si luego no tienen liquidez ni para pagar un litro de leche en los ultramarinos de la esquina?

En fin. En el tema del dinero sólo hay que aplicar una fórmula sencilla y contundente: no gastar más de lo que se tiene (y menos si no es tuyo).

Y ya.




miércoles, octubre 15, 2008

Instantáneas de Los Ratones Paranoicos

Así es. Un post más sobre este fin de semana atípico. Todo para dar testimonio del paso por la Ciudad de México de lo más cercano que tenemos en el continente a los Rolling Stones.

Dale.



La banda y el lugar...


Cuando teníamos a Juanse tocando a cinco centímetros.

Panorámica de Los Ratones frente a su hinchada argentina (los mexicanos jugamos de visitantes en nuestro propio campo).

El Salmón en la Ciudad de México

Entre rock y tangos Calamaro se entregó a sus fans, que lo esperaron más de 20 años
Arturo Cruz Bárcenas
La Jornada

El rock y el tango crearon una atmósfera de música y calle de Argentina la noche del pasado lunes en el Auditorio Nacional, en el concierto de Andrés Calamaro, quien se presentó por primera vez en México y sucumbió ante la algarabía, la entrega de miles de jóvenes que corearon sus canciones, sumados a sus paisanos y admiradores. Todos vieron cómo el llamado Salmón besó el escenario del foro de Reforma, en gesto simbólico de agradecimiento y de empatía con los artistas que por ahí han pasado.

Fue Calamaro más que en vivo, que abrió con Salmón. Como impulsado por un resorte, ese público, mayoritariamente adolescente, se levantó de su asiento y ya no se sentó en dos horas. Los chicos, de su nuevo disco La lengua popular, ya consabida, que dice: “Si te toca ir arriba antes que yo, porque existe la vida eterna, lleva de parte mía un cucumelo, por si no llovía en el cielo, y de parte de los 22, se lo das al chico, cuartetero, y dale un abrazo muy largo a mis amigos que se fueron primero”. Es la nostalgia por los amigos y la necesidad de apreciar la amistad en vida.

Tuyo siempre, de amor sabinesco. En el escenario todo cuenta y Calamaro lució una playera negra con la imagen de Emiliano Zapata, fusil en mano. Sus infaltables lentes oscuros. Soy tuyo la unió a una tonada de Sabina. Ambos se han comunicado en la misma frecuencia. “Voy a hacer una canción sobre ese tema antes de que me la gane Joaquín”, ha dicho.

“A la manera de Gardel”.

Anunció que cantaría unos tangos “a la manera de Gardel”. Se colocó un gran clavel en la solapa de un saco negro que vistió para el momento. Se sorprendió de que el Auditorio en pleno se supiera esos tangos. Veinte años lo esperaron y algunos más tiempo. “Es inmoral sentirme mal por haber querido tanto…” Es el drama y el tormento plasmados en una letra de alguien que trató de vaciar un dolor.

Los muchachos con los brazos en alto cantaron Los mareados, uno de los tangos de la época media, dijo Calamaro. Añadió que algunos se van a sentir identificados con ese tema. Tiene voz y la experiencia de la noche, de las desveladas que se requieren para tanguear.

Dijo sentirse como en su terruño. “Gracias, México, por haber sido casa de muchos argentinos.” Al centro, sobre unas bocinas, dos banderas enlazadas, de su país y estas tierras aztecas, reflejaron el sentir de Calamaro. Se oyó Nostalgia.

Todo estaba listo para la archiconocida La flaca, esa mujer de poca carne a la que le pide, se le ruega, que no niegue sus amores, que son favores. En el estribillo el público, en su colectividad, fue una sola garganta. Tomó un ramo que una dama le regaló. Repartió las flores entre las personas de las primeras filas.

Calamaro ha logrado el equilibrio entre comercialidad y calidad, el difícil y para algunos imposible punto medio de la conseja aristotélica. Paloma fue el cierre, la rola que refiere que la ilusión se va con la vida, pero antes interpretó Alta suciedad, una de sus tonadas más conocidas y ácidas. Pura ironía, ironía pura.

Así, garganta fresca y todo, en compañía de su grupo, que incluye excelentes guitarristas, la noche del lunes, Calamaro sucumbió ante la fuerza y la entrega del público reunido en el principal espacio de espectáculos del país.






Gran noche de Andrés Calamaro en el Auditorio Nacional
EFE

El músico argentino Andrés Calamaro abarrotó el Auditorio Nacional a pesar de auto erigirse como un "ilustre desconocido". Los 10 mil espectadores que asistieron al concierto salieron muy complacidos por la actuación del ex vocalista del legendario grupo Los Rodríguez.

Diez mil espectadores, muchos compatriotas suyos, se dieron cita en el considerado máximo escenario de México para ver, en dos horas y media, como Calamaro transitaba desde una actitud elegante a lo Bob Dylan hasta el descontrol de un Rolling Stone.

La pose elegante, americana con margarita gigante en el ojal incluida, le duró apenas cinco canciones, las que tardó en dirigirse al publico con un “compañeros y compañeras mexicanos, muchas gracias” cuando callaron las guitarras.

Calamaro se despojó de la chaqueta y dejo al descubierto, junto a una camiseta del líder revolucionario mexicano Emiliano Zapata, su lado rockero de Mister Hyde; en el patio de butacas comenzó a llover adrenalina mientras el cantante presumía de pulmones con gritos casi en falsete.

Tras “5 minutos más”, volvió a calarse la americana del Doctor Jeckyll y se deshizo de sus gafas para sacarse unos tangos del corazón, como “Los mareados”, lo que descubrió a la numerosa hinchada argentina entre el público.

Pasaban los minutos, las canciones, y Calamaro, de nuevo metamorfoseado en puro vigor, parecía no tener ganas de fingir su retirada para escuchar al público pedirle más; besaba el suelo, alababa a una audiencia “que Mick Jagger soñaría” y tiraba flores.

Calamaro se marchó del escenario, pero seguía hiperactivo y después de unos sorbos de mate volvió para conceder al respetable el “Sin documentos” de Los Rodríguez.Dos temas de su pasado más tarde, el argentino se deshizo en elogios a México “tendríamos que volver una vez por semana”, dijo.

Dos veces le lanzaron a él la camiseta de los “Pumas”, equipo de fútbol capitalino, y dos veces la exhibió sin ponérsela. Lo que sí se colgó fueron las banderas de Argentina y México, después de ondearlas atadas al micrófono.

Llegado el final, se quitó las gafas, hizo la reverencia de rigor con la banda, lanzó besos y desapareció. Se encendieron las luces, el público empezó a retirarse… y Calamaro regresó bajo los focos, para mandar el último abrazo.

Resaca musical

Anoche me sentí un pelín raro porque ya me había acostumbrado a que cada velada hubiera un concierto intenso. Bueno. Bienvenido a la normalidad, me dije.

En esta resaca musical que experimento pienso en que el recital de Calamaro estuvo bastante bueno. Pero, si me preguntaran cuál de los tres me pareció el mejor saldría con la clásica frasesita sin compromiso y pasteurizada de "depende...".

Es decir, el de Los Paranoicos fue especial porque la distancia entre ellos y el público fue menos de un metro, porque cuando Juanse bajó del escenario para tocar lo tuvimos justito enfrente, porque brincoteamos como si fuese una fiesta privada y porque estoy casi seguro que cuando vuelvan ya serán más famosos en estos territorios de Mesoamérica (y, por lo tanto, habrá mucho más culturosos deseando verlos).

El Tri, bueno, qué decir de esta banda nacional. Sonaban canciones y me acordaba de momentos específicos de mi vida. Suena Seguro de vida y me veo cantándola a todo pulmón con mi colega Jorge en un salón del colegio del Sagrado Corazón al que fuimos en el pueblo poblano (y después recibiendo toda una oleada de bolitas de papel de nuestros compañeros para callarnos). Escuché Pobre soñador y me ubicaba en 1993, el año en que dejaba el pueblo y me venía a la gran ciudad con mi maleta cargada de ilusiones (je, je), mientras allá se quedaban familia, amigos, novia y tal. Venía Agua mi niño, Violencia, drogas y sexo, y Hasta que el cuerpo aguante y ahí estaba ese saborcito a alcohol barato en los labios y desenfreno durante los primeros aquelarres juveniles. En fin. Cinco horas de terapia ocupacional y sicológica sobre quién son, de dónde vengo y a dónde voy.

Y Calamaro..., hombre, qué gran concierto. Una formación rockera de cuatro guitarras, un bajo, batería y teclados abriendo fuego con aquella de "quiero arreglar todo lo que hice mal, todo lo que escondí hasta de mí, quiero contar lo que yo sólo sé, tu perdón Pancho Villa también...". Y luego la parroquia coreando el "olé olé oleeeeé, Andrés, Andrés...". Y el jersey de Pumas en el escenario. Y luego la identificación total con Alta suciedad, Loco, Flaca, Crímenes perfectos..., y la parte de tangos, no, no, no. Genial. Además, Calamaro instaladísimo en figura mítica latinoamericana con toques de Tom Waits (movilidad en el escenario y figura), Keith Richards (rostro), Bob Dylan (elegancia inicial y voz), Mick Jagger (Jack El Saltarín en el Auditorio) y, claro, el propio Andrés Calamaro como él mismo.

Qué bueno que me sacudí un poco la abulia y me decidí por ir a los tres...

Y como dijo el mismo Calamaro: voy a empezar a vivir porque tengo muy poco que decir.

martes, octubre 14, 2008

Dios salve a Los Ratones Paranoicos, a El Tri y a Andrés Calamaro

Así es. Vaya tríada de conciertos de fin de semana.

El sábado, en Ruta 61, un concierto íntimo y cercanísimo con Los Ratones Paranoicos. Tuve a Juanse tocando enfrente de mí y estuve brincoteando con los argentinos de la zona que llegaron a hacer el aguante a sus compatriotas.

El domingo, cinco horas ininterrumpidas de concierto con El Tri, un largo y extenso paseo sentimental por varias etapas no sólo de la vida de esta banda mítica mexicana, sino de la existencia de cada uno de los asistentes. Además, un rosario de invitados de lo más variopinto que conjuntó, por un lado, al carismático Charly Montana con Lalo Tex y, por el otro, a los mismos Ratones con Miguel Ríos y Celso Piña.

Ayer lunes, la apoteosis: El Salmón en su primera presentación en la Ciudad de México. Vaya energía, vaya carisma, vaya personalidad, vaya calidad musical y vaya simbiosis con la parroquia. Uno de esos recitales que no se olvidarán. Todo el Auditorio coreando Flaca al tiempo que Andrés ondeaba las banderas de México y Argentina. También la exhibición dos veces del jersey de Pumas que le aventaban desde la grada. Inolvidable por donde se le vea.

En fin. Una batería de tres conciertos en donde se conjuntó mucho de lo que, por lo menos a mí, me define en términos musicales: energía rolling stoniana y buen rock. Juanse de Los Ratones moviéndose como Mick Jagger en el pequeño escenario del antro, El Tri interpretando en cascada She's a rainbow, (I can't get no) Satisfaction y Jumpin' Jack Flash, y Calamaro afirmando que tenía un público que ya envidiaría Mick Jagger con su look cercanísmo a Keith Richards.

Un fin de semana irrepetible.









lunes, octubre 13, 2008

Jeffrey G. Williamson, catedrático de Historia de la Economía en Harvard.

"Es el fin de la prosperidad que comenzó en los sesenta".

LLUÍS AMIGUET

A mi edad he vivido casi tantas crisis como las que he estudiado. Nací en Connecticut. Llevo 50 años casado con la misma mujer: 4 hijos y 5 nietos. Bush es el peor presidente de la historia y soy historiador. Todo me va bien menos la bolsa. He inaugurado curso en la UPF.

Empiece por poner esta crisis en perspectiva histórica: las crisis son inevitables. Ya he visto unas cuantas. Esta es una más y no es comparable a la del 29 en magnitud y estragos, aunque tampoco es de las pequeñas.

Nadie discutirá a partir de ahora que el mercado necesita regulación.

No se confunda. Existen dos interpretaciones de las causas de esta crisis: una es que ha sido la falta de regulación financiera la que la ha provocado, y otra - no desdeñable- que, al contrario, ha sido el exceso de intervención política en los mercados.

¿. ..?

Estos economistas apuntan que ha sido la Administración chapucera de Bush, a través de las hipotecarias públicas Fannie Mae y Freddie Mac y al propiciar tipos bajos por electoralismo, la que ha provocado la burbuja inmobiliaria causante del marasmo.

¿Y ahora qué?

Confío en la capacidad del presidente de la Reserva Federal, mi amigo Ben Bernanke, especialista en crisis económicas, y también confío en las herramientas que hemos ido creando desde el 29 para suavizar estas crisis. Demos tiempo a que esas actuaciones y las de gobiernos y bancos centrales cundan.

Me enternece su confianza en los supervisores económicos...

¡Yo no confío en mi secretario del Tesoro! Me parece incompetente, como el resto de la Administración Bush. Pero creo que los bancos centrales tienen profesionales capaces de evitar que volvamos a sufrir un 29.

¿Qué recomienda usted?

Si la crisis ha sido por falta de regulación, la intervención pública la mejorará, pero si ha sido por exceso de mala intervención, entonces no estoy tan seguro de que podamos atajarla tan fácilmente. En cualquier caso, las acciones que se tomen serán mejores que no tomar ninguna, por lo menos para evitar el sufrimiento de los ahorradores.

¿De verdad el sistema funciona?

Si miramos la historia verá que llevábamos quince años de prosperidad ininterrumpida y que desde la Segunda Guerra Mundial ha habido recesiones, sí, pero nada comparable al 29, porque hemos ido creando mecanismos de corrección que han funcionado.

¿Quiénes pagan más por la crisis?

Los más pobres y los más ricos, aunque estos lo notan menos, claro. Y los que más se merecen pagarla son esos financieros que sufren las iras de votantes indignados por los sueldos de Wall Street, que hoy en su fracaso gestor resultan aún más aberrantes.

¿Las quejas tienen fundamento?

Sí, la disparidad entre sueldos ha batido todos los récords históricos en EE. UU. y las desigualdades entre salarios también.

Galbraith ya denunció esos sueldos.

Pero cuando Galbraith los estudió, en los sesenta, la desigualdad entre retribuciones era mucho menor que ahora; entonces la sociedad era menos rica pero menos desigual.

¿En todo el mundo?

Sí. Aunque en conjunto hemos creado más riqueza, también hemos creado más desigualdad salarial en todo Occidente.

¿Por qué?

Veamos: ¿qué nuevas fuerzas han modificado nuestra sociedad desde los sesenta?

¿. ..?

La globalización ha creado riqueza por la difusión de la tecnología, pero esa tecnología ha conseguido mejores retribuciones sólo para los más preparados. Hemos tenido un baby boom y por eso ha habido más jóvenes - siempre menos prósperos y peor retribuidos-, además hemos tenido una ola migratoria enorme y ya sabe que a los inmigrantes siempre se les paga menos.

Habla usted en pasado.

¡Es que ha pasado! El shock financiero nos está ocultando ahora mismo un fenómeno de más largo alcance: el fin de la gran era globalizadora que duraba desde los sesenta y que nos ha traído también la prosperidad.

¿Qué está pasando?

Esas fuerzas globalizadoras están agotadas. El baby boom se ha frenado: vivimos una recesión demográfica incluso en los países en desarrollo que están dejando de exportar inmigrantes. A EE. UU. cada vez nos llegan menos trabajadores preparados de India, México, China, Asia y el este de Europa.

¿Vendrán menos pateras a España?

Espere: Occidente será más pequeño y menos importante en relación con la economía mundial, pero también más equilibrado, menos injusto y con mayor calidad de vida.

Pues mejor.

Eso pienso yo también: la grandeza de un país se mide por la calidad de vida que ofrece a sus habitantes y no por el tamaño de su ejército o su población. Pero nos queda una carta crucial para describir la nueva era: África. África será la nueva protagonista.

¿Más malas noticias?

Al contrario, existe un consenso en que África va a experimentar un boom económico con crecimientos de dos dígitos. De momento, tome nota de que el 80% de los estados africanos tiene un régimen multipartidista que ya ha superado dos elecciones legítimas. Es un dato, no sólo esperanza.

¿Se acabarán las pateras?

¡Al contrario! La emigración de un país se dispara no cuando es más pobre, sino cuando comienza a salir de la pobreza y puede pagarse el pasaje. Pasó en Irlanda, pasó en Asia y pasó en España y pasará en África: prepárense para enfrentarse a la mayor presión migratoria de su historia: la africana.


1914

"Lo que sucede hoy es muy parecido a lo que sucedió en 1914. Se había vivido un periodo globalizador inusitado, incluso más intenso que el que ahora acaba: el mundo estaba occidentalizado y uniformado por los imperios coloniales; la prosperidad creaba enormes fortunas y el capital fluía sin trabas ni regulaciones de la mano de poderosos bancos transnacionales; también la mano de obra, empujada por la demografía, circulaba entre continentes para servir a las nuevas tecnologías industriales en la mayor emigración - mayor que la actual- de la historia. El futuro aparecía brillante y prometedor ante los emprendedores y nada parecía impedir que la prosperidad continuara. Y sin embargo...".


sábado, octubre 11, 2008

Fin de semana musical

Así es. Ha iniciado el maratón musical del fin de semana. Este mediodía he ido a una cosa de ópera que han montado en el Auditorio Nacional bajo el argumento de que son funciones que uno nunca podrá ver en la ciudad, pero que por ello algunos avezados nos traen directamente y vía satelital desde Nueva York.

Para ser sinceros, sólo se los recomiendo si son verdaderos fans de este tipo de música y si están dispuestos a ver en colectivo algo que bien podrían adquirir en cualquier tienda y después verlo desde la comodidad de sus salas. Una función de ópera, sí, pero no en vivo. Con buenas interpretaciones, sí, pero vía satélite. Difíciles de ver en la ciudad y en el país, sí, pero que al final del día las ves como si fuese un largo video musical.

Lo peor de todo fue que, cuando concluye la obra (Salomé), la parroquia todavía se arranca a aplaudir con fervor como si estuviesen en el mismísimo Opera House. Chale.

En fin.

Pero digamos que esto ha sido como el negrito en el arroz. Al rato vienen Los Ratones Paranoicos, mañana El Tri y el lunes Andrés Calamaro. Todo sin dosis de anestecia de por medio.

Pondré a prueba mi frágil hígado.

viernes, octubre 10, 2008

Y todavía más

Bueno, esta mañana se han desatado los demonios de las publicaciones y quiero llenar este blog de porquerías hasta que superemos las 20 mil visitas.

Bueno, no tanto.

Simplemente es que hoy hay bastante material que poner y comentar. El que haya muchos conciertos --y buenos-- en la ciudad me pone de buenas (el negrito en el arroz es la Srita. Dows en el Metropolitan, pero bueno...).

Vamos con algo de El Salmón...



Calamaro: los exquisitos no aprueban la diversidad, como la cumbia en el rock
Arturo Cruz Bárcenas
La Jornada

“Un buen autor siempre piensa que ya se le acabó la inspiración. Nuestros héroes del rocanrol son la prueba viviente de que no hay que tenerle miedo al dentista y para todo hay que seguir sonriendo. Siempre he pensado que la más reciente canción fue la última”, expresó Andrés Calamaro, rockero argentino que se presentará por primera vez en México los días 10 y 11 de octubre en el teatro Diana de Guadalajara, y el 13 en el Auditorio Nacional capitalino. Promueve su disco La lengua popular.

En conferencia de prensa posó para decenas de cámaras. Acostumbrado a los flashazos, hizo la señal universal del rock, apoyado en su bastón y protegido por lentes oscuros. Es una estrella con luz propia y su experiencia en la música se remonta su niñez, cuando oía a The Beatles, Santana y The Creedence.

Sobre la cumbia y sus valores, ritmo que aborda en La lengua popular, dijo: “Hay algunos exquisitos o nostálgicos que por lo menos no aprueban esos caminos hacia la diversidad musical y creen que somos irresponsables al rescatar algunos modos de la cumbia o de la música más melódica, que son los géneros de cuando empezábamos con el rock; los que despreciábamos cuando éramos jovencitos.

“Creo que antes estábamos equivocados. En una época hay una tendencia, muy respetable también, de rock en Argentina que no influye dentro de lo que se considera hermoso, digamos como el rocanrol más tradicional o la música melódica, o La cumbia de los mirlos, pero, bueno, a mí me gusta y, además, puedo estar equivocado.”

En torno al trabajo que ha hecho con Lito Nebia, dijo: “Es el fundador de lo que él mismo llama rock de autor. Hace 40 años creó la que se considera el kilómetro cero de la canción de rock en Argentina, La balsa, también conocida como La bolsa, y otra serie de piezas; nosotros compartimos escenario y giras, y más: la vida con uno de los fundadores de Los Gatos, que es Ciro Foliata, también rosarino, como Lito.

“Lito es un auténtico paréntesis; tiene un corazón de músico, muy grande. Él no puede manejar coche por el cerebro de músico que tiene, o sea, piensa tanto en música que no vería los semáforos. Además, Lito hizo su propio sello y grabó jazz, candombe, folclor de vanguardia e incluso los últimos discos de tangos de Roberto Polaco Goyaneche, quien estuvo sin contrato durante cinco años.”

Calamaro ofrecerá tres conciertos en Colombia. Al respecto, expuso: “Estamos todos muy gratamente sorprendidos por la expectativa que nos cuentan; están cerrando nuestros próximos conciertos inmediatos. Vamos a llegar igual que a Guadalajara y acá, al DF, con nuestra humildad intacta, listos para sorprenderlos y tocar lo mejor que sabemos”.

Robo frustrado

“En el disco de Juanes toco una canción con él; la relación fue ideal. El gran nexo fue Gustavo Santaolalla. Intenté robarle uno de los Oscar de la Academia; aproveché la circunstancia, pero los había dejado en su casa y sólo pude traerme este bastón. Así que cuando vienen a casa, a mis amigos les digo que es un Oscar. Me encontré con Juanes, que me convidó con una canción preciosa y profunda, llena de contenidos musicales, armónicos y también testimonial. Ahora somos amigos.”

Abundó en la cumbia: “A mí me encanta”. Cuando era chico, cuenta, se escuchaba El Palacio de las Flores, “hace más de 30 años era la cumbia orquestal. Ahora se entiende una que está más por la estética del hip-hop, aunque creo que el sonido es como La cumbia de los mirlos, de los pajaritos, pero con sintetizador y, por otro lado, está la melódica que se hace en la ciudad de Santa Fe.”

Añadió que le falta “una crítica a alguno de mis discos en una revista británica.” “¿Qué si iría al tianguis del Chopo? Ya fui una vez, en la época de La Maldita Vecindad y los Caifanes. Somos amigos y fuimos. Espero que nos lleven y compremos algunos discos piratas, películas”. Prefiero creer que no soy un cantante de rock romántico; me parece que La lengua popular es un disco con las suficientes ironías y letras sofisticadas.”

Sobre su afición a fumar mariguana, dijo: “Hubo un problema hace 12 años, pero no fue tan grave, durante la filmación de una película. Me dijeron que había cometido un delito. Pregunté: ¿es estupro o tráfico de drogas? Cualquier otra me parecía que no podía ser un problema de verdad. (Era) el uso de sustancias ilegales. Vivimos en una o varias sociedades donde la tendencia es a ocultar la verdad en todos los ámbitos. Todos escondemos lo que hacemos, en nuestra casa, a ustedes, a la policía. En ese sentido, sigo siendo franco…”

–¿Qué le parece la mariguana mexicana?

–Eso será cuestión de probarla… pero vamos a ir primero al gimnasio y después…




Más

Y, por cierto, el domingo también hay un buen recital en la ciudad: El Tri de Alex Lora y sus amigos cumple sus cuatro décadas, por lo que se van a montar un concierto de varias horas en el Palacio de los Deportes con invitados diversos entre los que están, qué tal, los mismísimos Ratones Paranóicos.

Digamos que yo crecí escuchando a El Tri. Un tiempo fui muy muy fan. Después como que me alejé. Ahora he regresado, con ciertas reservas, pero he vuelto. Pero que conste que para mí el tiempo de Lora y Cía. terminó por ahí de inicio de la década de 1990 con el álbum Indocumentado. Y nada más. Ya los discos nuevos no los he comprado ni lo haré. Ni aunque vengan en un disco mp3 de Producciones Barba Roja los incluiría en mi súper potente y nuevo iPod recagardo. No. Sus últimos trabajos me parecen totalmente prescindibles y, mejor así, me quedo con aquello que musicalizó mi tierna juventud en éxtasis en el pueblo poblano.

De hecho, hace aproximadamente dos meses fui con unos colegas a ver a este grupo al mismísimo palenque de feria de Tulancingo, Hgo. Suena extraño, pero así fue. Y antes, por ahí de agosto de 2007, El Año Cabrón, los había ido a ver a un terreno baldío de la feria de Zacatlán, Pue. Con esto El Tri se confirma como un grupo al que se le puede ver casi al mismo nivel que Ninel Conde o Los Barón de Apodaca. En fin.

Sin embargo, aún con todo y que la infumable Chela Lora sale y dizque canta y tal, y que el propio Lora convierta el concierto en una especie de show cómico-mágico-musical, con albures, gritos y comentarios como de abuelito incluidos, con todo y danzante del Zócalo que baile el rock con penacho y taparrabo, con todo y sus gags repetidos y gastados (¡que chingue a su madre el governator!), hay varios momentos en los que sí se estremece la piel y la conciencia, sobre todo cuando se acuerda que tiene buenas rolas en el catálogo y las toca para placer de aquellos que lo hemos seguido ya por varias décadas.

Uno de esos momentos fue, por ejemplo, cuando cantó Vicioso, la vieja rola del disco rojo en la que, más que decir que le gusta el rock y la mota y el reventón y el cotorreo locochón, se trata de una declaración de principios que lo acompañará hasta la tumba: "para mí la vida no vale nada sin el rock". Luego, otra canción que me pareció bastante decente fue Mujer diabólica con un arreglo como muy a lo stoniano, por lo que me agradó asaz. Claro, las clásicas Mente rockera y A.D.O., también como que prenden.

En fin.

Bastante conciertos en la ciudad para musicalizar la violenta vida mexicana de principios de siglo.


La víspera

El fin de semana se avisora ya desde una víspera intensa. Acabo de leer que Los Ratones Paranóicos, esa manda de argentinos admiradores e imitadores de los Rolling Stones de los que me he convertido en fan de clóset, tocarán en la Ciudad de México. ¿Qué tal? Perfecto.

Después, el domingo, tenemos el Pumas versus Real Bañil en el Olímpico Universitario. Ya desde ahora imagino que de la mano del Tuca Ferreti iremos a por el empate (¡el cero cero es lo de hoy!).

El lunes, la joya de la corona: el concierto que El Salmón Andrés Calamaro dará por primera vez en la ciudad en el Auditorio Nacional. Los boletos ya los tenía desde hace como seis meses. No sé para qué tanta anticipación. Quizás Calamaro ya sabía de la debacle financiera mundial y nos evitó sobresaltos vendiéndonos las entradas desde mucho tiempo antes. Algo así sucedió con la primera presentación de los Stones en el DF, allá en enero de 1995, cuando los boletos los vendieron desde octubre de 1994, justito antes de que todo valiera...

Último día de la semana que comienza raro: la gente anda como excitada y quiere guerra. Algunos se aceleran y otros de plano están instalados en el valemadrismo más recalcitrante. Yo espero transitar las horas que restan para arribar a la salida calmando esta furia que me cargo y que bien puede musicalizar el propio Andrés: "hoy me siento tan radical, pero tengo aprendido el papel principal".

jueves, octubre 09, 2008

Ya tengo iPod

Para mi total y absoluta sorpresa, Apple ha cumplido su promesa de garantía respecto a su producto iPod y, sobre todo, en un plazo menor al indicado. Así es, hoy, apenas dos días después de haber llevado mi aparato a reposición, me han enviado un correo electrónico en el que me notificaban que ya podía pasar a recoger el nuevo. ¿Qué tal?

Ahora comprendo por qué esa empresa tecnológica es líder mundial. Digo, además de sus adelantos en cuestiones netamente computacionales y tal, su servicio al cliente es no bueno, sino lo que le sigue. A lo mejor estoy exagerando por estar emocionado y todo eso, pero el hecho puro y duro es que, a dos días de reportado, hoy tengo un nuevo iPod con las mismas características del que se ha averiado.

Y eso, en un mundo como el nuestro, habla bien de la empresa.

Gracias Steve Jobs.


Crisis

Hoy por la mañana escuchaba el noticiario de W Radio y me di cuenta --o más bien, reafirmé-- que la cuestión económica pinta dura. Recesión, inflación, pérdida de empleos, escasez, histeria. Pero lo que más rápido llegó a mi cabeza fue que, de ocurrir una crisis de fuertes dimensiones, será la primera que deba afrontar como jefe de familia.

En efecto, yo, como nacido en la década de 1970, mexicano y todo eso, pues siempre he vivido con la sombra de la crisis sobre mi cabeza y en mi bolsillo. En 1976 no la sentí tan fuerte porque acababa de nacer, en 1982 veía a mis padres hacer algunos malabares para resistir el embate de las locuras de López Portillo, en 1988 leía las noticias y todo eso, pero seguía con mi vida normal en la secundaria, en 1994-1995 la experimenté en carne propia y, finalmente, en estos últimos dos sexenios digamos que no ha habido una así de proporciones bíblicas. En todos estos casos mi papel se limitó a ser más bien espectador y lector de noticias calamitosas, ya que --repito-- mis padres --sobre todo mi madre-- fue quien se encargó de coger el timón y llevarnos a buen puerto (las madres suelen ser así de eficientes en las cuestiones de la administración de los hogares y tal).

Pero ahora, en este año 2008 del Señor, ya sin mis padres y casado, veo que el que tiene que realizar algunos ajustes a la carta de navegación... soy yo.

¿Por qué menciono esto? Bueno, porque en el noticiario referido entrevistaron a una serie de personajes que --según-- saben sobre las finanzas personales y todos ellos coincidieron en que, ante la crisis inminente, lo que debemos hacer es sentarnos para realizar alguna especie de planeación financiera para sortear los posibles escenarios negativos venideros. Es decir, montar presupuestos, saber con exactitud cuánto entra y cuánto sale, destinar lo suficiente para aquellas responsabilidades ineludibles, reducir gastos superfluos y analizar la posibilidad real de liquidar deudas y de ahorrar.

Regularmente los primeros pasos que la gente realiza ante este tipo de acontecimientos son los relativos a eliminar egresos que bien pueden ser prescindibles, por ejemplo, las diversiones, los paseos y los pequeños lujos. Otra cuestión es que, ante esto, la mayoría se pone histérico y comienza a realizar pequeños actos de depredación que antes no solía hacer, tales como agandallar al otro para obtener un beneficio en la calle, el súpermercado, la oficina, entre otros. Claro, algunos deciden irse por la fácil y comienzan a dedicarse al viejo oficio de hacer cambiar de dueño a las cosas.

En fin. Interesante escenario. Crisis --y no precisamente la de Chico Ché-- y al frente de una célula de la sociedad.

Ya veremos cómo se van desarrollando los acontecimientos de esta debacle financiera mundial (hasta suena como si tuviéramos que darle la razón a los mayas con eso de que el planeta se termina en 2012 y tal...).





miércoles, octubre 08, 2008

1701

Nada mejor para celebrar la entrada mil 701 a esta bitácora que hablar brevemente sobre el Premio Nobel de Literatura que darán mañana en el municipio de Estocolmo de Juárez.

Hay varios candidatos que ya despuntan. Uno de ellos es el norteamericano Philip Roth. Creo que es como que el más conocido entre los culturosos de este lado del planeta porque, por ejemplo, si pongo que también están nominados con fuertes posibilidades de triunfo Per Olof Enquist e Inger Christensen, sólo los más blufferos o los más mentirosos dirán que sí, que qué bueno, que se lo merecen por su gran obra creativa y por reflejar los más grandes desafíos de la lengua universal a principios del siglo XXI y etcétera.

La verdad, yo preferiría que se lo dieran a Mario Vargas Llosa o al propio Roth. Digo, tampoco estaría mal que fuese el mexicano Carlos Fuentes, sobre todo ahora que anda celebrando sus 80 años.

Sin embargo, estoy casi cierto que se lo darán a cualquiera de esos dos con nombres raros que escribí líneas arriba. La razón: a la Academia como que le gusta ponerse exquisita y darle el Premio a seres que en su casa (y en su editorial) conocen.

Lo malo es que luego por esas razones andan los culturosos mesoamericanos súper clavados comprando y leyendo esos libros que nunca jamás antes habían escuchado (y luego andan santificando y tirando netas como si fuesen los poseedores de la verdad).

Así que, desde aquí, la bitácora burocrática que es shampoo y acondicionador al mismo tiempo elevamos un grito hasta Escandinavia:

Vargas Llosa, Vargas Llosa, ¡ra, ra ra!

martes, octubre 07, 2008

Ya no tengo iPod

Así es. Esta mañana noté algo raro cuando quise cambiar la canción después de bañarme. La cuestión fue que la ruedita no respondía a mis indicaciones. Subía y bajaba en el menú, pero digamos que no hacía "enter". Chale.

Después de comer he ido a una iShop que acaban de abrir por acá en el sur y me dijeron que mejor fuera a otra que ya estuviera totalmente montada. Bueno. Ahí voy a un Hiperlumen y, pues, ni modo, se acabó el iPod.

Lo bueno es que, como aún alcanza garantía, en un lapso de tres a cinco días hábiles --según-- me harán una reposición física, es decir me darán uno nuevo. Snif.

Adiós al iPod, el juguete tecnológico con el que me he identificado más. Serán de tres a cinco días hábiles difíciles de roer...

Como dijo el buen Nietzche: la vida sin música sería un error.




Matemáticas y política (II)

Bueno, acabo de leer que el flamante Premio Nacional de la Juventud ha decidido donar el dinero del reconocimiento tanto a la Universidad Nacional (al fondo de becas del Colegio de Ciencias y Humanidades) como a Colegio del Mundo Uníos, institución que lo tiene cursando el bachillerato en Noruega.

Eso está bien. Mejora su imagen. Aunque no dudo que haya sido resultado de la "asesoría" que recibió por parte de sus ahora dos nuevas amistades, López Obrador y Ebrard Casaubón. Si uno fuese mal pensado elucubraría que ambos le dijeron, mira, regresa el dinero, no importa, después habrá más y, de esta forma, limpias tu imagen frente a aquellos que te criticaron, ¿cómo ves? Y el otro dijo sale. Digo, es una posibilidad.

En fin. Lo que ahora debe hacer el joven Gómez Emilsson es eso, irse a estudiar a Noruega y prepararse para después ser un funcionario público eficiente, ya sea espurio o no en opinión de otros. Bueno, también debería cortarse esa melena tipo Buki.

Tal cual.

lunes, octubre 06, 2008

Matemáticas y política

Marcelo Luis Ebrard, alcalde de facto de la Ciudad de México, ha felicitado y ha ofrecido todo su apoyo al chico inteligente que ha llamado "espurio" al presidente Felipe Calderón cuando recibía de sus manos el Premio Nacional de la Juventud.

El nombre del joven es Andrés Leonardo Gómez Emilsson. Su mérito ha sido tener aptitudes para las matemáticas.

Ante esto, mi pregunta es, ¿no acaso este gesto de Ebrard puede ser considerado como una apología de la violencia? Más que una defensa a la libertad de expresión, siento que ha sido una manera de encender los ánimos y de caldear el ambiente a tontas y a locas.

Es decir, ¿qué habría pasado si algún chico inteligente, de apellido extranjero y melena exagerada hubiese llamado "loco" o "resentido" al candidato perdedor de las presidenciales de 2006, Andrés Manuel López? Quizás las mismas personalidades de las izquierdas estarían culpando a la actual administración de filtrar provocadores en sus actos con el fin de crispar aún más el ambiente político nacional.

Que el chico inteligente en matemáticas tenga sus opiniones es correcto. Que las exprese mejor. Que lo haga en un acto en donde ha recibido (porque no lo ha rechazado) una condecoración de ese mismo gobierno que encabeza, según él, un "espurio" (por lo tanto, también es "espurio" su premio), me parece que puede ir de lo valiente a lo ingenuo sin aduana de por medio.

Pero que un gobernante, también miembro de la administración pública y representante popular, exalte y apruebe ese tipo de actitudes, me parece altamente peligroso por una sencilla razón: está abriendo la posibilidad a que suceda con cualquier otro personaje político.

Ahora muchos lo aprueban y hasta lo aplauden porque ha sido contra alguien que no es de sus simpatías. Pero, ¿qué hay si mañana sucede contra el referido López Obrador o contra el propio Ebrard Casaubón? No creo que esta clase de actitudes se feliciten y se les brinde todo el apoyo por parte de otros actores políticos.

Para finalizar, una reflexión: saber de matemáticas no necesariamente significa saber sobre política.




Seguir siendo

Odio decirlo, pero se los advertí: el partido de la expectación, el verdadero clásico del fútbol mexicano, Pumas versus gallinas, terminó con un insípido empate. Aunque, la verdad, me sorprende el resultado: con el Tuca en el banquillo siempre jugamos a empatar a cero, así que haber metido un gol ha sido algo increíble. Gracias.

sábado, octubre 04, 2008

4, 5, 6

Y bien, para ponerme al corriente, dicen que de buenas intenciones están llenos los panteones.

4

Sabemos todos la frase, 2 de octubre no se olvida, pero ¿que es lo que no se nos debe olvidar?
Recuerdo que hace muchos años, bueno no tantos, me fastidiaba y ni siquiera veía los noticieros de televisa, era realmente odioso ver a Jacobo dar noticias insulsas, leer boletines de Gobernación y ocultar las noticias, las pocas veces que los veía, por ejemplo cuando entrevistaba al presidente en turno resultaba nauseabundo cómo se arrastraba ante el poder.

Ahora, paradógicamente lo primero que veo en la mañana es el noticiero que conduce el hígado de Loret de Mola, el imberbe licenciado en ciencias de la comunicación cuyo programa me sirve básicamente para saber el estado del tiempo y que es la media, para salir a los deberes.

Pues resulta que el 2 de octubre dan una entrevista a un joven periodista que a su vez entrevistó al expresidente Echeverría, lo único destacable fue la evidencia del cinismo del actor político en esos años de negar toda responsabilidad y persistir en la versión oficial. Lo sorprendente es la lucides de Echeverría y su plena conciencia del manejo de los medios.

Por lo demás creo que ya se nos olvidó a todos como para qué ganamos la libertad de manifestarnos si ahora con la inseguridad no podemos salir a las calles. El Estado totalitario y represor se ha desvanecido para dejar lugar a los factores reales de poder. Sin embargo algunas cosas nunca cambian, como es el control de la corrupción e impunidad que siempre ha reinado en las corporaciones policíacas.

Podemos concluir que hemos ganado la libertad, pero ahora no sabemos como imponer el orden, son los riesgos de las democracias.

5

Es viernes, ya pasó el 2 de octubre pero aquí sigue la fiesta. Resulta que dos compañeros y el suscrito cumplen años el mismo día.

Mis dos compañeros, por separado, han considerado que es bueno empezar desde el viernes los festejos por semejante fecha, cosa que da para más de una anécdota a este sitio hecho exprofeso para dar cuenta de ello.

No quiero aburrirlos, pero en una de esas reuniones se dieron todos los elementos clásicos del alegre convivir de la vida oficinesca: la secretaria bailando con el jefe, el director pasado de copas que se pone impertinente, los cantantes espontáneos. Lo que sí siempre he sostenido es la vena artística que se da por estas tierras, todos son cantantes, al llegar el mariachi todos quisieron poner su mejor empeño interpretativo.

Dos cosas, entre todas me llamaron la atención: la primera es la amplia afición por los mariachis que se da en estas tierras y por su puesto por la música ranchera, de me hace como que son ganas de reafirmar que son mexicanos, de hecho están usando un slogan que dice algo así. La segunda fue uno de los invitados, un personaje que ya se me ha hecho singular, es un inmigrado chino, ahora se hace llamar Jorge, lleva ya treinta años en este país y estado, no habla muy bien el español ni mucho menos sabe cantar, pero de él he escuchado la mejor versión de México lindo y querido que presenciado, le crees cuando pide que lo traigan aquí.

6
El sábado es día de San Panchisco, he hablado a México y me dicen que efectivamente se dio el cordonazo de san francisco, como bien me decía mi abuela, ese día empiezan a sentirse las lluvias y las heladas, al menos en Guanajuato. Para mí este día tiene un significado especial, pude festejar a mi hijo a pesar de sentirme apesadumbrado, hoy hace una año fue el último día que pude ver a mi mamá y platicar con ella, jamás imaginé que no la volvería a ver. Son de esas cosas que se van acumulando con el pasar de los años.

Hoy también hace un año que estaba convaleciente el Maese Manolo, no pude verlo ese día en el hospital fui haciendo una escala en México y ese mismo día salí en avión al sureste, pronto nos veríamos y espero que sea por muchos años más.