martes, octubre 28, 2003

Ahora, como buen burocrata descanse el lunes- pero nada mas en este blog, porque en realidad estuve en otros menesteres.

A veces me siento como esos cienti­ficos de la desaparecida CCCP. ¡Ah que tiempos! Cuando vei­amos las victorias deportivas, sus adelantos en la carrera espacial, los avances tecnolgicos, solo ve­amos la parte publica, lo que la propaganda oficial queri­a propagar.

Pero no sab­amos lo que habi­a detra¡s, dicen que hubo un caso del equipo de futbol que fue amenazado de muerte si no ganaba, y en el partido definitivo con los rumanos estos se dejaron ganar, finalmente para ellos era solo un partido de futbol, pero para los rusos la derrota era el camino seguro al gulag.

Pues bien, ayer y antier fue­ sometido por enesima vez a trabajos forzados, me pidieron (es un decir) hacer una ponencia de cuarenta minutos de duracion, no dormi­ del domingo para el lunes, llegue a las nueve a la oficina, termine la redaccion a las 11 a.m. y a esa hora me llamaron para revisarla, me inquirieron si estaba bien hecha, obviamente dije que si­, y entonces vino lo peor, queri­an la traduccion al ingles, nos pusieron a dos a trabajar en ella, tuve que involucrar a mis amigos en los trabajos forzados, comi­mos en media hora y regresamos a su revision. Eran las cuatro y media y el trabajo apenas iba a empezar, a las ocho y media estabamos terminando y se le ocurrio que hicieramos la presentacion en power point. Todo termino a la una de la mañana, pero yo a las 10 p.m. ya habi­a tronado.

De verdad que me veia como esos cienti­ficos con bata blanca encerrados en un laboratorio para descubrir la vacuna contra el antrax.

Cuando vei­a esas peli­culas de espias, siempre me decia ¿pero esos cientificos si son tan inteligentes por que se dejan mangonear generalmente por un enano mani­atico? Hoy me pregunto como deje que me pasara eso a mi­? Lo que no he mencionado es que en todo ese proceso el jefe hace gala de sarcasmo, te da las gracias una vez y te cajetea veinte, obviamente yo ya ni lo pelo ni para bien ni para mal, ademas de que ayer en la tarde ya estaba en piloto automatico, solo me repeti­a: si soy tan inepto, ¿entonces por que me llama cada que tiene una duda y quiere que le haga sus discursos, o por que el quiere buscar una reforma en la constitucion cuando en realidad esta en un codigo? creo que era mejor el anonimato.

Hoy fue la presentacion, no me invitaron y supongo que algo asi­ senti­an los cienti­ficos cuando vei­an regresar a los astronautas en su aparato de t.v. en su minusculo departamento, esperando el siguiente proyecto.
(A petición de los lectores, debo aclarar que este texto lleva deliberadamente el menor número de acentos para evitar incompatibilidades)

viernes, octubre 24, 2003

¡VIERNEES!

Por fin, la orilla alcanzada, aunque a medias, llegamos a media quincena, por lo tanto nos espera un triste fin de semana, tal vez el sábado dedicarlo a arreglar el coche o llevarlo a verificar, o dedicarlo al aseo de toda la casa; y el domingo, tendrá que ser de güeva, tal vez comprar un pollito rostizado para toda la familia, porque todavía hay que aguantar 5 días más.

Pero hoy, no hay mejor manera de iniciar la mañana que con un tequio, los compañeros se pusieron de acuerdo y en el área de fotocopiadoras se reunieron, cada uno llevaba un platillo, y se hizo la taquiza como a las 9, ya para las 10, cuando empiezan a llegar los jefes, todo estaba consumado, hasta a mí me tocó postre (unos duraznos en almibar).

Tal parece que en estos momentos se readquiere la conciencia de clase -pa que no nos echen a todos los burócratas en el mismo saco- está la banda, el grueso que no rebasa los 5 salarios mínimos; están los mass media, que cada vez se ven más pauperizados ya hasta parecen argentinos talvez con mucha preparación pero no muy por encima de los 5 salarios; y empieza la burocracia media alta, los subdirectores que ganan veintemil pesos, los directores que ganan 30 mil pesos y los particulares que se encuentran en un nivel intermedio pero muy cercanos a los Dioses; y finalmente la alta burocracia, directores generales y jefes de unidad que ganan entre 80 y cien mil pesos; subsecretarios que ganan ciento treinta y el secretario que quien sabe cuanto gane (si tienen curiosidad chequen las páginas de transparencia de cualquier dependencia y creo que en la administración privada es más o menos lo mismo).

Es fácil identificar quienes nunca entrarían a la fotocopia del tequio y quienes no se angustian por llegar al fin de quincena.

jueves, octubre 23, 2003

JUEVES

Ahora hay que sacar los pendientes, contestar oficios, responder llamadas; el auténtico fragor oficinesco, el frente de batalla.

Y como decíamos llegó el jefe y pide un discurso para antes de las 15 hrs. porque va a participar con su ponencia en algún foro. Los impuestos están trabajando, no lo podemos negar.

Sin embargo, se percibe cierta parsimonia en el ambiente, como que se presagia el fin (por lo menos de la semana)

miércoles, octubre 22, 2003

Los cumpleaños de los burócratas en la oficina.

Pasteles comprados en panaderías cercanas, oportunidad de acercamiento con los de arriba, sonrisas fingidas de aquellos que no son tus colegas, reguero de refresco de uva agitado, caras de enojo de las secretarias que se odian entre sí, caras de tristeza-vete-lejos durante los cánticos de mañanitas y tal...

Yo siempre prefiero beber en alguna cantina de mala muerte junto a mis verdaderos colegas hasta que alguno diga: ¿dónde la vamos a seguir? ¡Eso es sinceridad y fraternidad, y no requisitos sociales!

Felicidades, burócratas...

¡Mieeercoles!

Ni modo, a medio camino, es el día que requiere el despliegue de mayor esfuerzo, porque ya está bien entrada la semana, ya no hay pretextos para no avanzar.

Es el día que inevitablemente se tendrán que desahogar los pendientes acumulados el lunes y martes y además los trabajos que se encarguen hoy son para descargarlos hoy, máximo mañana pero no los podemos dejar para la próxima semana. El jefe y el jefe del jefe siempre estarán pidiendo algo.

Hay varios ejemplos. Hoy llega el jefe, que nunca descansa, de una exitosa gira de trabajo por Singapur, vendrá eufórico por los éxitos obtenidos y por la buena imagen del país en el extranjero, lo que en lenguaje oficinesco se traduce en que querrá descargar todos los pendientes y como no se ha ajustado al cambio de horario seguramente estará en su despacho llamando gente hasta las 3 de la mañana.

También se dará el caso del jefe que se va a un coloquio, porque nunca descansa, en algún hotel de avenida Reforma, todos pensarán que será un día de reposo en la oficina, tal vez para muchos, pero no para todos porque estará hablando por celular constantemente, pidiendo oficios, que le manden un fax, que le manden un coreo electrónico, que vaya el chofer por él a las 15 hrs.

Bueno, pues este día estén seguros que sus impuestos están siendo bien aplicados, se gastan eficaz y eficientemente para el cumplimiento de las diversas labores en beneficio del interés público (y luego dicen que no trabajamos).

martes, octubre 21, 2003

Martes, martes, martes

Tal vez el día más pesado de la semana para la burocracia, apenas empieza la semana y el viernes se ve bien lejano, lo peor es el momento de levantarse y darse cuenta que estamos más allá de la mitad de la quincena, cási dos semanas completas, ¿como sobrevivir?

Sin embargo todavía hay pequeñas alegrías que te da la vida. Al llegar al trabajo a esta oficina todos llegan corriendo para ganarle al reloj checador, (ese maldito instrumento de tortura psicológica para la mayoría de los trabajadores, frio instrumento que te indicará si puedes o no cobrar el día completo, primer signo del oprovio para someter la voluntad de las personas simples que se integran a cualquier oficina).

Pues bien, hoy por la mañana el reloj marcaba las 7 a.m. cuando realmente eran las 8 a.m., fue como un regalo de los dioses. Cuando está adelantado por cinco minutos, todos gritan y bociferan, incluso hay quien se atreve a ir al departamento de personal o incluso a la coordinación administrativa a reclamar tal falla y exigen un disculpa y resarcir el daño. Pero hoy todos estuvieron calladitos, nadie dijo nada, todos con una sonrrisita cómplice, como queriendo que nadie notara el error, tal vez una confusión con el próximo cambio del horario de verano. Ya como a las 13hrs. alguien se atreverá a dar aviso del error, si nadie lo ha notado, digo para poder salir a tiempo y no tener que laborar una hora más.

El joven Palazuelos (bueno, ni tanto) sigue haciendo declaraciones "candentes" (uuuuh!!) sobre la antigua burocracia mexica. Digo, la verdad, para el chisme lavanderil esto está muy bueno. La banda tenochca sacia de esta manera lo que ya sabía en su inmenso imaginario colectivo: que desde el poder se cometían infinidad de excesos y que muchos de los recursos que aportaba --coercitivamente, claro-- al Estado terminarían siendo derrochados por mozalbetes como el "actor" que ahora nos ocupa.

Repito, si yo hubiese sido miembro de aquella burocracia priísta y ahora leyese las declaraciones de este tipo, por lo menos sí trataría de que ya lo sacaran del hermanote very imbécil people o de que mínimo le bajara al tonito...

Me consuela saber que siguiendo estas dinámicas, en el futuro sabremos la verdad sobre las bolsas piratas que usa la niña Cristina, sobre el verdadero monto de los trajes de la señora Martha y sobre la cantidad que, se dice, ha gastado en brujos, artimañanas y demás supercherías para alejar a sus enemigos políticos, v.g. la señora de la Concha y otro que era el "gordo" González (según los datos del libro de la argentina Womack).

Y yo que ni bono sexenal recibo...


Durazo financió primer disco de Luis Miguel: Palazuelos

Cuenta el actor que "El Negro" les regalaba ametralladoras; señala que enseñaba a tirar con armamento de alto calibre

Redacción Online/edición nocturna
El Universal online
Ciudad de México
Martes 21 de octubre de 2003

04:43 El actor Roberto Palazuelos sigue revelando algunos excesos de ex funcionarios públicos durante charlas que tiene dentro de la casa de Big Brother. Ahora contó sobre su relación con Arturo "El Negro" Durazo, ex jefe policiaco, quien fue acusado de corrupción y vínculos con el narcotráfico durante su gestión en el gobierno de José López Portillo.

El hermanito relató que cuando era niño, Durazo le regalaba ametralladoras a él y sus amigos, entre los que se encontraban el cantante Luis Miguel y el actor Héctor Suárez Gomís.

Señaló que en lugar de obsequiarles dulces, o juguetes, el otrora general policiaco, en reuniones familiares, les enseñaba a disparar con diferentes armas, hasta con su propia pistola.

“Nos dejaba tirar con armas gruesas” les contó a sus hermanitos que reaccionaron con incredulidad, y hasta bromearon con el comentario.
Sin embargo, Palazuelos dijo que era muy en serio.

Cuando sus hermanitos se callaron siguió con sus anécdotas. Dijo que Durazo era muy espléndido. “Sacaba fajos de mil dólares y nos regalaba billetes de a cien y de a cincuenta a todos los chavitos”.

Dijo que “el Negro” fue quien descubrió el talento de Luis Miguel y le financió su primer disco. “Quien descubrió a Luis Miguel fue mi general”, dijo.

Señaló que su relación fue tan cercana, que lo visitaba en la cárcel. “Cuando trabajaba en “Muchachitas” (telenovela) fui a visitarlo. Con lágrimas en los ojos me dijo que le daba gustó que a mí y a Luis Miguel nos vaya muy bien”, dijo.

lunes, octubre 20, 2003

San lunes
Pa que nos odien más los pagadores de impuestos, que somos todos.

Hoy como todos sabemos, es lunes, pero para la burocracia es un día muy especial, un día de guardar

Según la encuesta Latinobarómetro la mayoría en nuestro país y en otros países de america latina, ha mentido fingiendose enfermos para no ir a laborar.

¿Alguien podría hacer una encuesta hoy? Por lo menos en mi oficina hubo tres ausencias, varios retardos y no se cuantos pretextos para no laborar.

A una se le enfermó la hermana y está en el hospital, a otro se le enfermaron los hijos y tuvo que llevarlos al médico, uno más no pudo regresar de su pueblo por las lluvias. También hay quien llega a las 11a.m. (siendo que su hora de entrada es a las 9a.m.) porque se sentía mal, pero hizo el esfuerzo de llegar.

Tambien se dan los casos de asistencias virtuales, como don Laureano, que llegó temprano, antes que de costumbre, hizo su trabajo matutino y al medio día cuando ya hacía calorcito fue por unos tacos con mucha salsa verde para quitarse el malestar, como no funconó el restodel día se la pasó en servicios médicos para que le dieran acido acetilsalicilico y unos alka selzer.

Por eso, si el día de hoy fuiste a hacer algún tramite a ventanilla (que irónicamente podía ser el pago de un impuesto o servicio) y se encontraba cerrada, no te preocupes, regresa mañana que ahí estará el servidor público al pie del cañon, pero por favor no intentes ir ni el lunes ni el viernes, por si las dudas, ese es otro beatifico día del que hablaremos en la semana.

viernes, octubre 17, 2003

A propósito del L aniversario del voto de la mujer en México.

Una cita del libro "La historia y sus protagonistas" de Editorial Domen, citado por Griselda Álvarez en el acto conmemorativo.

"Según la tradición judeo-cristiana, que está en la base de nuestra cultura occidental, prueba que son (las mujeres): viles, inconstantes, cobardes, frágiles, obstinadas... imprudentes, astutas... fáciles de disgustar, llenas de odio... insinceras, frívolas, insaciables sexualmente, además de perezosas, avaras, codiciosas, orgullosas, envidiosas, imprudentes... prontas a la ira..., lo que les falta de fuerza en las manos lo tienen de veneno en la lengua...".

Saludos a todas las chicas que leen este su blog de confianza, Sexacional de Burócratas...

martes, octubre 14, 2003

Yo diría que mucho poder tenemos...

Je je je.

A ver... escritorzuelos alter-nativos... ¿quieren su beca del FONCA? Pues... ¿a dónde creen que tienen que pasar a tramitarla y a recogerla?

A ver... estudiantes ravers... ¿quieren su beca del CONACYT? Pues... ¿ustedes no se forman?

A ver... viajeros del mundo occidental... ¿quieren su passport? Fila en la delegación...

Bastuardo... ¿quieres ser alguien reconocido por la legalidad? ¡Necesitas tu CURP!

Estamos en todos lados... Sabemos quiénes son...

No nos menosprecien...

lunes, octubre 13, 2003

los burócratas somos humanos como todos, pero nosotros tenemos ciertas parcelitas de poder.

por ejemplo, si una compañera que está frente a una ventanilla atendiendo 100 o 200 personas por día decide que eres un pendejo y que por ese mismo hecho no mereces su atención lo logrará. logrará que tengas un entripado marca diablo y que salgas de la oficina bufando porque ni el departamento de quejas te atendió como según tú se debe.

ahí radica nuestro poder. un poder terrenal, inmediato, material. castigamos aqui en la tierra. lo divertido es que quienes nos odian no pueden hacer nada por cambiar su odio en otro sentimiento.

si alguien necesita su pasaporte para salir de este país no basta con acudir a otra oficina, los burócratas estamos hechos con el mismo molde, cortados por la misma tijera. así que no basta con que tengas mucho dinero, tendrás que dejar un poco de tu fortuna por evitar filas, malos tratos, jetas largas, momentitos y demás molestias que sabes que ocasionamos.

eso es sólo una muestra de nuestro poder. aparte siempre logramos arruinarte el día, incrementar la gastritis y el odio que corroe tu alma.

pero nosotros sabemos perdonar como Jesuscristo perdonó a los filisteos y a todos los hombres. no guardamos rencores para nadie aunque nos restrieguen la palabra burócrata en la cara. te servimos en la medida en que estés dispuesto a valorar y esperar por el servicio. de cualquier forma, aquí estaremos siempre, trabajando por y con tus impuestos por tu propio bienestar.

así sea.

Si yo fuera algún colaborador del ex presidente De la Madrid aún en funciones o miembro del antiguo régimen con ciertos intereses en el presente, mandaría poner orden a las declaraciones o, definitivamente, callar la boquita de este tipo que cada vez que se emborracha o se pone feliz comienza a soltar el rosario de excesos en los que vivió amparado por la amistad de un hijo de MMH.

Y no es por mojigatería o espíritu ultra conservador. No. Simplemente es por salvaguardar las instituciones del Estado, es decir para que Presidencia de la República no pierda –aún más—su investidura frente a la mexicaniza.

Chequen nada más...

Revela Palazuelos sus excesos en sexenio de De la Madrid
Relata el actor sus anécdotas de poder, amparado en la amistad con Gerardo de la Madrid, hijo del que fuera Presidente de México
Redacción Online/edición nocturna
El Universal online
Ciudad de México
Lunes 13 de octubre de 2003
05:34 El actor Roberto Palazuelos confió a sus hermanitos de la casa de Big Brother algunos “excesos” en los que incurrió durante el sexenio de Miguel de la Madrid (1982-1988), amparado en la amistad con Gerardo de la Madrid, hijo del que fuera Presidente de México.
En medio de una plática sobre aventuras de adolescentes, Palazuelos contó que una ocasión se estrelló en un automóvil robado. Confesó que aquella vez se encontraba drogado y con posesión de armas de uso exclusivo del ejército.
Recordó que habló a Los Pinos para pedir ayuda a su amigo Gerardo de la Madrid. Cuando llegó la policía lo arrestaron y lo introdujeron en una patrulla. Sin embargo, dijo, a su rescate llegó cuerpo de seguridad de la Presidencia de la República enviado por la esposa del ex presidente, Paloma Cordero.
Para salvarlo del aprieto, según relató, un funcionario de Los Pinos lo identificó como hijo del presidente, con lo cual no se le alzó ningún cargo y fue liberado inmediatamente.
“Era mucho poder para unos chavitos”, reflexionó Palazuelos sobre su situación en aquella época.
Entre los excesos en que incurrió, contó que disponía de automóviles que confiscaba la Secretaría de Hacienda.
“Iba al corralón y escogía un automóvil y me lo llevaba, ahí nadie se oponía, pues ya sabían que onda conmigo”, contó.
Relató cuando introdujo a unas “amiguitas” a una de las casas presidenciales de descanso cuando viajaba con la familia De la Madrid. En aquella ocasión reveló que se robó una patrulla de la policía federal en la madrugada para irlas a dejar y no se diera cuenta el Presidente.
Señaló que su confianza con De la Madird llegó a tal grado, que en privado rompía el protocolo de dirigirse a él como “Señor presidente” y le decía “Don Mike”.
Al acabar el periodo presidencial de Miguel de la Madrid, señaló que su grupo de amigos, encabezado por Gerardo, no salió durante meses, pues tenían muchos enemigos y ya no estaban amparados por la Presidencia de la República.


Y faltaría por saber la verdadera historia de la madriza que propinaron los guarros del hijo de Zedillo al encargado de la seguridad de U2 en aquel diciembre de 1998, hecho por el cual nos privamos de la última gira de los Irish...

¡Maldito poder!

La gente suele exigirle demasiado a sus administraciones públicas en comparación de la forma en que lo hace con los miembros de la IP (iniciativa privada).

El Estado y su personificación, es decir el gobierno, siempre son blanco fácil de todo tipo de reproches por diversas circunstancias de la vida cotidiana: si llueve, el gobierno; si el peso cae, el gobierno; si aumenta el número de suicidios entre los adolescentes, el gobierno; si las chicas no consiguen novio, pinche gobierno; si el camión de la basura pasó repleto, gobierno que no previene nada; si el esposo tiene disfunción eréctil, el gobierno no atiende los requerimientos de salud de los adultos contemporáneos y/o mayores; si el perro de mi vecina ladra y aúlla cada vez que suenan las campanas de la iglesia de al lado, ¡puto gobierno represor!

Pero, ¿qué me dicen de nuestros golden boys?, ¿de los que supuestamente representan la vanguardia mexica?

Pongo un ejemplo: Adrián Fernández.

Sé que no tiene mucha relación con el tema del Sexacional pero... ¿a poco no nos dice nada el que este tipo, con toda una parafernalia detrás, con toda una escudería a su nombre, con toda la prensa respaldándolo en todo momento, es decir con todo el poder de la empresa privada a su favor NUNCA PUEDA GANAR NADA???

Es decir, desde siempre, desde que me acuerdo, a este tipo se le ha calificado como el sucesor de los Hermanos Rodríguez en cuanto al automovilismo nacional. Campañas de tele y radio pasan diciéndonos que Adrián Fernández ahora sí va a ganar y se va a ir derechito a la Fórmula 1. O, bien, carreras van y vienen y el tipo sigue debiéndonos un campeonato o, por lo menos, hilar al menos un par de competiciones exitosas.

Y no es por cuestión de suerte o lesiones o falta de recursos. Veamos, por ejemplo, al joven Montoya, colombiano, que participó en el mismo serial que Fernández hace unos años y que ahora, octubre de 2003, ya corre en los grandes circuitos.

A mí no me gustan las carreras ni el automovilismo. Sin embargo, creo que esto puede ilustrar perfectamente el que la ineficiencia, los sueños nunca obtenidos y la carencia de resultados no son exclusivos de la gente que está dentro y al frente de la administración pública. No. Ahí tienen a nuestros pro-hombres empresariales que siguen alimentando las rutinas del ya merito, del ora sí van a ver y del jugamos como nunca y perdimos como siempre.

Y si no, vean que Fernández no ganó nada este fin de semana en el Autódromo, cuando según él venía “por todo” y “nada más por el primer lugar”.

Ja ja.

Me recuerda a otro tipo mediocrazo que comenzó su carrera con mayor publicidad que la Guevara: Alejandro Cárdenas. Otro petardo que nunca, nunca, nunca despuntó (a pesar de que tuviera detrás a toda la “industria” apoyándolo).

Así que, concluyendo colegas, no sólo de burócratas se compone el reino de los fracasados y los outsiders.

¡Salud Adriancito! Espero que pronto te dediques sólo a lo tuyo, es decir a la publicidad de miles y miles de cosas, y dejes de querer engañarnos con que eres un gran corredor de autos y, sobre todo, que ya no intenten vendernos miles de bagatelas con tu (perdedora) imagen.

viernes, octubre 10, 2003

Pasen a la Ventanilla Única a dejar sus comentarios sobre esta bonita extensión de la oficina...

El Tagboard está a su entera disposición...

Un servicio más de sus amigos de siempre: los burócratas.

Poniendo nuestro blog al día y a la vanguardia.

Así como un padre llama a su hijo para transmitirle algo trascendental en la vida, hoy, octubre 10, me detengo un poco del llenado de formularios y papeles y declaranets, para decirles: colegas, alto, escuchad esto que tengo que deciros.

A todos los que vieren y entendieren, sabed:

EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA FEDERAL NO HAY COSAS URGENTES...

¡HAY PENDEJOS DESESPERADOS!

Tomadlo en cuenta al momento de ingresar a este bonito gremio, cuando hagan fila en alguna ventanilla, cuando esperen una beca del FONCA o del CONACYT, cuando tramiten su divorcio o el registro de su primer hijo, cuando acudan a pagar el predial o a sacar por enésima ocasión su CURP, cuando vayan por su passport o cuando estén detenidos en el Campo Militar número 1.

Si alguien los mira feo, si el caos parece reinar a su alrededor, si las secretarias se desgañitan diciendo “licenciado, licenciado, todo urge, todo urge”, bueno, si todas estas señales del Apocalipsis aparecen, entonces, repetid todos tomados de las manos:

EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA FEDERAL (Y HASTA EN LA ESTATAL O MUNICIPAL, INCLUIDA LA DEL DISTRITO FEDERAL) NO HAY COSAS URGENTES...

¡HAY PENDEJOS DESESPERADOS!

jueves, octubre 09, 2003

¿Cuáles son las frases más guarras de la historia?

Deben haber cientos de ellas, sin embargo, recuerdo perfectamente una. Ah, bueno, antes de que la lean, si hay señoritas que siguen el Sexacional, pues, les recomiendo que lo piensen. Muchas de nuestras amigas nos han dejado de hablar por las siguientes líneas. Caballeros, igual y apréndansela. Ahí va, pues...

Señorita 1 camina por la calle acompañada de Señorita 2. Señorita 1 es infinitivamente superior en belleza que Señorita 2.

Aparece Guarro 1 en la escena. Las mira de frente y se sorprende por la imagen de Señorita 1. A la Señorita 2 ni la pela. Las Señoritas 1 y 2 se desvían un poco de su dirección original para no hacer colisión con Guarro 1 sobre la acera. Guarro 1 se pega un poco a la pared en señal de disgusto por haber sido despreciado por las Señoritas 1 y 2.

Hay un momento crucial en el que forman una línea recta, similar a la que hace poco formaron los planetas de La Vía Láctea.

Guarro 1 se detiene y observa cómo Señorita 1 y 2 se alejan.

Entonces, Guarro 1 suspira, junta las cejas y dice a Señorita 1:

--- MAMACITA... TE BAJO LA REGLA A CHUPETONES... ¡¡¡Y CHINGO A MI MADRE SI ESCUPO!!!

Fin de la escena.

lunes, octubre 06, 2003

En julio de 1997 se celebraron las elecciones intermedias del sexenio de Ernesto Zedillo. Una de las cosas más sobresalientes de esos comicios fue la designación del Jefe de Gobierno del Distrito Federal por medio del voto de los habitantes de esta entidad, situación que no sucedía desde principios del siglo XX.

Arrastrados quizás por este efecto, basado en la popularidad del Ingeniero Cárdenas que arrasó en la Ciudad de México, al igual que los candidatos a diputados locales del PRD, en diversos estados del país el partido de la izquierda mexicana alcanzó posiciones nunca antes sospechadas en su corta historia: alcaldías, diputaciones locales y federales, los primeros ejecutivos estatales.

Sin embargo, esta noticia tomó a los perredistas fuera de foco: acostumbrados a perder, acostumbrados a no experimentar la victoria, acostumbrados a las movilizaciones poselectorales de manera sistemática, a la realización de manifestaciones en contra del "fraude" y la negación recurrente de la transparencia de los resultados comiciales, los integrantes de este partido no supieron cómo comportarse en aquellos estados en los que la gente les había mostrado su confianza por medio de su voto. Por ejemplo, en Morelos.

La misma noche del seis de julio de 1997 y los días posteriores, en la Ciudad de México se recibieron llamados del CEE-Morelos para decir al CEN-PRD:

-- ¡¡Ganamos!!, ¡¡ganamos!!

-- ¡Perfecto!

-- Pero... ¿¿¿¡¡¡AHORA QUÉ HACEMOS!!!???

Algo que suele suceder tanto a instituciones como a las personas...

Ergo, tengan cuidado con lo que sueñan porque puede volverse realidad...

jueves, octubre 02, 2003

¡¡Burócratas güevones!!!

¡¡Por eso están panzones!!!

...y rompieron todos los cristales de abajo...

no hay problema, ellos lo pagarán con sus impuestos... jeje

¿Puede checar mi tarjeta temprano?

¿De qué va a ser su atole, joven?

¿Tacos de canasta: uno por tres, dos por cinco?

¿Qué pasó con lo de tu tanda man'to?

¿Ton's qué, tu casa o la mía mi reinita?

Pocas palabras o términos generan tal consenso como BURÓCRATA. Es decir, puedes preguntarle a la gente ¿qué piensa usted cuando escucha el concepto "democracia"?, y todos responderán de manera diferente: el gobierno de todos, la tiranía de la mayoría, lo contrario a oligarquía, etc. Pero, cuando se trata de saber la opinión de los demás sobre BUROCRACIA, todos coinciden en que se trata de seres:

- Abúlicos
- Conformistas
- Retrógradas
- Mal vestidos
- Flojos
- Intratables
- Soberbios
- Simples
- Ineficientes
- Inertes
- Incólumes

Y así un sin fín de adjetivos que dan santo y seña de todas las características negativas de los que hoy nos autodenominamos "servidores públicos".

Pero, cuidado: repito, el término "burócrata" no sólo es exclusivo de los empleados de las oficinas públicas (pueden leer mi antiguo post sobre la definición de Max Weber Chatanuga).

En fin.

En el posgrado escribí un ensayo --más bien, un reporte de lectura-- sobre uno de los autores que mejor han definido el problema de la burocracia, su contraposición a la empresa privada y la perspectiva de cambio en la organización estatal: Ludwig von Mises.

Antes de transcribirlo, adelanto una de sus conclusiones más contundentes:

El problema del sector público es que lo componen burócratas que se rigen por normas y procedimientos, en contraste con la empresa privada donde el objetivo rector es la obtención de ganancias. Sin embargo, pongan ustedes al empresario más exitoso, al más capaz, al más agresivo en los negocios en la administración pública, ¿y qué tendremos?, pues un nuevo burócrata al cabo de algunos meses de trabajo. ¿Por qué? Porque el sector público crea valor de una manera diferente al de la empresa capitalista.

Aquí va, pues...

Ludwing von Mises, Burocracia, Madrid, Unión Editorial, 1976, pp. 1-81.

La obra de Ludwing von Mises explora las diferencias entre los sistemas de producción capitalista y socialista a través de sus respectivas burocracias, señalando que las particularidades más notables de ambas son, en el primer caso, un espíritu empresarial enfocado a la obtención de ganancias por medio del mejor desempeño humano y, en el segundo, una gestión planificada que no puede ser cuantificada ni controlada y que genera apatía y bajos rendimientos.

El autor inicia definiendo al capitalismo como un sistema caracterizado por la libertad y la iniciativa privada cuya organización se basa en el beneficio, y al socialismo como un aparato de compulsión y coerción sustentado en una organización burocrática. Sin embargo, en ambos sistemas existe un rechazo sistemático hacia el término “burocracia”, despectivo y deshonroso, por lo que buscan erradicarlo a través de estrategias divergentes.

El fenómeno de la burocratización aparece en el socialismo por las políticas progresistas que buscan inferir en todas las actividades humanas lo que crea nuevos cargos y secciones administrativas ocupadas por un mayor número de burócratas. Por su parte, en el capitalismo surge por el crecimiento y expansión de las empresas privadas.

Para von Mises, la burocracia –en sí misma—no es el problema. El punto radica en el papel que juegan en ambos sistemas, ya que mientras en los estados se reconoce cierta utilidad dentro de una soberanía extendida sobre una amplia zona con el fin de crear cohesión social, se critica su intromisión en todas las actividades de la vida que inhiben el liderazgo creador, el dinamismo y el progresismo de la empresa capitalista.

Por lo tanto, el dilema planteado por el autor radica en escoger entre la gestión empresarial o la gestión burocrática.

La organización laboral en la empresa capitalista se apoya en las características propias de este sistema económico. Los cálculos de pérdidas y ganancias –exclusivos del capitalismo—basados en la teneduría de libros y la contabilidad indican el estado de los diferentes componentes de la producción. Esto permite al empresario, al momento de delegar autoridad, tener confianza en la dirección de su taller o fábrica porque todos sus subordinados conocen el objetivo a alcanzar: el máximo beneficio posible.

Bajo este esquema se genera un círculo virtuoso que se extiende a todos los niveles de la empresa –desde el director general hasta los aprendices y el personal de limpieza, por ejemplo—en el que el ingreso y la permanencia laboral de los involucrados en la producción se guíe por el mejor desempeño, siempre bajo la calificación del “juez implacable” del sistema de pérdidas y ganancias. En los negocios sólo cuenta el éxito, sentencia von Mises.

Sin embargo, se reconoce que ciertas áreas no pueden ser calificadas por el sistema de pérdidas y ganancias. En ese caso se aplica la discrecionalidad de los jefes para juzgar a su personal. Esta evaluación no se realiza de manera arbitraria contra el personal por antipatías o prejuicios, ya que en caso de suceder los principales afectados serán los propios directivos.

El autor recalca que en el socialismo las cosas son totalmente diferentes: al no existir mercados ni precios se imposibilita el cálculo económico que ajuste la producción a las demandas. Asimismo, no es cuantificable el modelo por pérdidas y ganancias, por éxitos o fracasos, por lo que “se permanece en la oscuridad”.

Cuando los jerarcas delegan autoridad a los gobernadores dentro de los modelos despóticos se limita la discrecionalidad de los segundos por medio de leyes y normas debido a su irresistible tendencia a ejercer el poder de la misma forma que sus superiores. El resultado de esto es que los delegados del poder y la administración se preocupan más por adaptarse y cumplir dichos reglamentos que por encontrar la solución más adecuada para los problemas (el “beneficio” en la empresa capitalista) transformándose en burócratas, es decir en administradores cuya primera virtud es cumplir con lo establecido.

Posteriormente, el autor critica el welfare state predominante en la época en la que el libro fue escrito, tachándolo de una tiranía de sus gobernantes al consistir en la creencia de que los gobernantes pueden hacer cualquier cosa que crean conveniente para la república. En opinión de von Mises esto no corresponde al personal administrativo ni a los jueces en un sistema democrático, sino al soberano (el pueblo) a través de sus representantes (el parlamento) bajo los pilares de la primacía de la ley y el presupuesto.
Esta convivencia entre un gobierno democrático y la burocracia es explicada por von Mises en el sentido de que la segunda, en sí misma, no puede calificarse como buena o mala, simplemente es “un método de gestión que puede aplicarse a diferentes esferas de la actividad humana”.

El aspecto negativo consiste en “la expansión de la esfera a la que se aplica la gestión burocrática” que restringe la libertad del ciudadano y trata de sustituir la iniciativa privada por el control del gobierno, es decir pasar de la organización basada en el beneficio por la organización burocrática de seguimiento de normas y procedimientos.

Al entender la ley como el instrumento para limitar el poder de los tribunales y las autoridades frente a la ciudadanía y no como las medidas encaminadas a ejecutar la voluntad de la autoridad suprema, la gestión burocrática se conforma con cumplir las reglas y disminuir la discrecionalidad (o iniciativa) de sus empleados. Demasiados ordenamientos crean confusión en la burocracia, en contraste con la claridad con la que los miembros de la iniciativa privada ubican el objetivo final (hacer provechosas sus operaciones).

De esta forma, el autor enlista tres características de la administración pública:

a) Sus objetivos no se pueden medir en términos monetarios ni controlar por métodos contables

b) No hay conexión entre ingresos y gastos

c) No hay precio de mercado para los aciertos

Por lo tanto, la gestión burocrática es igual al método aplicable a la conducción de asuntos administrativos y cuyo resultado no se refleja como valor contable del mercado.

La parte final de la lectura es una reflexión a propósito de las deficiencias de la burocracia. La población –de acuerdo con von Mises—se pregunta por qué no se aplican las estrategias seguidas en la iniciativa privada para mejorar el desempeño de la burocracia gubernamental. La respuesta del autor es contundente: no tiene sentido. Los empresarios metidos al gobierno terminarán convertidos en burócratas que deberán cumplir con las normas como aquéllos a los que criticaron.

Y esto se debe a la ausencia de un método de cálculo en la gestión burocrática planificada.

Sin embargo, para von Mises no tiene sentido porque reconoce que la administración pública y el gobierno crean valor de una manera diferente al monetario. Las reformas propuestas no podrían transformar un servicio en una empresa privada ya que un gobierno no es una compañía que busque beneficios y su gestión no se puede controlar por el sistema de pérdidas y ganancias.

Siendo éste el campo de acción general, la definición de sus trabajadores es la de burócratas, acarreando la pérdida de la competencia y la innovación al dar prioridad al cumplimiento de normas y procedimientos jerárquicos, en concentrarse en seguir las formalidades más que en hacer su trabajo de la mejor manera posible.

Lo anterior, en su conjunto, “mata la ambición, destruye la iniciativa y el incentivo de hacer más del mínimo exigido”.

posteado por mbg

miércoles, octubre 01, 2003

Algunos creen que los burócratas seremos eternos. es decir, cuando vamos a una oficina publica o privada hablamos con la señora de la ventanilla o la dependienta, o cuando hablamos a alguna oficina y nos contesta Lupita, creemos que así será siempre. Pero una de las fallas de la burocracia es que se compone de seres humanos que eventualmente se enferman o pueden ser victimas de alguna desgracia.

Hoy es el caso, acabo de enterarme que una persona con la que trabajé hace algún tiempo y que de alguna manera manatuve una amistad, se encuentra ahora en fase terminal, no se, creo que tiene un tumor cerebral, el efecto es que ya ahora no reconoce a nadie y dice puras incoherencias. No he podido ni querido verla, perop talvez en sus alucinaciones continúe contestando telefonos y saludando a sus compañeros de trabajo. Porr su bien espero que así sea y que su sufrimiento sea amortiguado.
¿Pero a quien le importa? En su lugar ya hay otra persona para contestar teléfonos y saludar a sus compañeros de trabajo. ¿Es otro sentido de la eternidad? ¿Una versión burocrática del infierno?

Con el tiempo uno descubre que los bajos fondos de la burocracia son muy amplios. En la universidad había compañeros que iban del extremismo de izquierda pasando por todas su alas, hasta los yupifresas que ya esperaban salir con título para colocarse en alguna posición de mando o liderazgo ya fuera como funcionarios o como dìputados o senadores.

Hoy muchos de nosotros hemos seguido caminos distintos pero al final nos une nuestro deseo de servir a México.

Aquellos antiguos líderes CEUistas hoy comparten puestos con algunos moderados del CGH en el gobierno del DF, mientras que otros servimos a la patria desde la trinchera del Gobierno Federal. Unos más luchan por puestos de elección popular y eventualmente ganan. Ahorran sus dietas y sueldos y ponen una tienda aqui, una lavandería allá, una bar acullá. Aparte de excelentes representantes populares han salido colmilludos emprendedores.

Ya lo decía Gengis Hank González, un político pobre es un pobre político.

Por eso, yo siempre esgrimo: Si en la vida no se vive para servir, no se sirve para vivir.

Es sorprendente que los funcionarios más jóvenes sean los más autoritarios. Yo no estoy viejo pero tampoco pertenezco a los teenagers. De hecho, estoy en el límite de lo que la ONU, la UNESCO o el Instituto Mexicano de la Juventud consideran que es la edad de un "chavo".

Bueno, el punto es que los nuevos "chavos" son los más fascistoides, autoritarios y verticales. ¿Sorpresa? Quizás no. Las encuestas muestran que es en el sector juvenil donde más desconfianza hay hacia la democracia. Claro. El carácter de los regímenes fascistas es mucho más atractivo para la muchachada por ser inmediato, definitivo y explosivo. Entonces, estos tipos son los que menos tiempo dedican a consensar sus ideas (bueno, algún nombre había que darle a lo que se les ocurre), a tratar de convencer a los demás de la utilidad de lo propuesto o a ejercer un liderazgo basado en la meritocracia y el ejemplo.

[Uf, esto último sonó a curso de la "mística del servicio"...]

Ah, por cierto, los más fachos son los que vienen de universidades privadas.

Esto me ha recordado algo que decían algunos colegas de ECM sobre quién es el peor tipo de persona que puede poblar la faz de la tierra: los pendejos-soberbios.

O como diría un ex-servidor público que lo mismo estaba en la nómina estatal que en la del partidazo: "es que no saben mandar, man'to".